Pesimista. Esa es la mirada que tiene el economista David Bravo, sobre el futuro de la reforma previsional. Desde su óptica afirma que no hay “un ambiente” para que se avance considerando que el próximo año es año electoral.

El director del Centro de Estudios y Encuestas Longitudinales de la UC y expresidente de la última comisión sobre pensiones realizada bajo el gobierno de Michelle Bachelet, no obstante, valora el avance del gobierno en buscar regular los cambios de fondos de AFP.

El gobierno ingresó un proyecto que busca limitar los cambios de fondos de pensiones, ¿era necesario avanzar en regular los cambios de fondos?

- Sí, resulta muy necesario regular los cambios de fondos así como a las asesorías previsionales. Los traspasos de fondos se han prácticamente triplicado desde 2014, lo cual muestra que se trata de una situación que debe regularse con urgencia por las implicancias que tiene tanto sobre las personas que se mueven constantemente entre fondos como sobre el resto de los afiliados. Se ha mostrado que estas conductas de traspaso continuo reducen la rentabilidad de los fondos de quienes las acometen. La razón de esto es que estas empresas no reguladas, que recomiendan traspasos, se han transformado en una suerte de secta con un séquito de ovejas reclutadas al amparo del analfabetismo financiero. Las estrategias que sugieren no son rentables para sus seguidores y definitivamente son perjudiciales para todos los afiliados por las externalidades negativas que les provocan. Parecieran ser solo rentables para quienes las impulsan sin regulación alguna.

El gobierno propuso dos fórmulas: permitir que los afiliados puedan realizar hasta dos traspasos de fondos en un año calendario, entre cualquier tipo de fondo, o permitir solo traspasos entre fondos adyacentes, todas las veces que el afiliado lo solicite, ¿qué le parecen estas fórmulas?

-Me parecen buenas opciones para restringir los traspasos. Acá lo relevante es que la gestión de estos fondos debe hacerse con criterios de largo plazo. Cuando el horizonte se cambia al corto plazo, se introducen distorsiones que afectan el objetivo de los fondos de pensiones. Evidentemente, suficientes distorsiones se han introducido ya en esta dirección con la dinámica de los retiros y con este rol creciente de los traspasos de fondos.

¿Cómo conviven esta restricción con la función de los multifondos?

-En la Comisión de Pensiones en 2015 manifestamos nuestra preocupación por el excesivo número de multifondos y sugerimos acotarlos a 3. La existencia de multifondos se debe compatiblizar con el objetivo final de los fondos de pensiones que requiere un horizonte de largo plazo, así como también con las limitadas capacidades de las personas para poder procesar la información.

Desde la oposición han señalado que si bien están dispuestos a discutir este tema, llaman al gobierno a avanzar en la reforma previsional, ¿ve espacio para llegar a acuerdos?

-Para ser bien franco, lo que he visto hasta ahora son muchos llamados a avanzar en la reforma previsional, por parte del gobierno y de la oposición, continuamente.

Sin embargo, este año las únicas acciones concretas que hemos visto han ido en la línea de disminuir los fondos de pensiones por la vía de los retiros. Durante el primer retiro que surgió por medio de una moción parlamentaria, muchos advertimos el peligro asociado, incluso el gobierno. Durante la segunda moción parlamentaria de retiro, lamentablemente el gobierno terminó finalmente sumándose a esta acción, probablemente para tratar de ganar control en la agenda. Hemos visto recientemente un anecdótico lanzamiento de un tercer retiro que ha recibido, por el momento, un masivo rechazo de todos quienes votaron en favor del primer y el segundo retiro. En este contexto, veo difícil avanzar en una reforma previsional si es que primero no se llega a un acuerdo amplio que parta por el reconocimiento del daño sobre el sistema de pensiones, el actual y el futuro, que han introducido estos retiros y que apunte a bloquear cualquier retiro futuro. Si ello no ocurre, ¿cuál es la posibilidad de legislar seriamente?

¿No ve probable que se logre avanzar en la reforma previsional?

-No hay un ambiente como para asegurar que la negociación vaya adelante, no hay muchos incentivos para llegar a un acuerdo. Desde el punto de vista técnico lo que me preocupa es que no noto que haya una real conciencia del daño que han generado los retiros. Por ejemplo, no veo a la Superintendencia de Pensiones haciendo los cálculos de cuáles serán los montos de restricciones, de cuánto más bajas serán las pensiones por los retiros, cuántos más bajas serán sin reforma.

¿Y esta falta de voluntad de quién es?

-Es del gobierno de todas maneras, pero también creo que no hay una contraparte seria, entonces eso es lo que más me preocupa. Además, tampoco el tema de los retiros está zanjado, entonces cómo se puede legislar una reforma que implicará un horizonte de 70 años si el escenario base no está definido. Lo único que veo son llamados a conversar, a llegar a acuerdos, ¡viven haciendo llamados! pero en realidad no sé si están hablando con alguien o simplemente son frases para la galería. Es un tema que seguirá abierto y será difícil que vaya a tener un cierre. Es muy difícil que eso suceda.P