El mercado laboral muestra señales mixtas: por un lado, el número de ocupados ha vuelto a superar los 9 millones, su mayor nivel desde la prepandemia. Pero por otro, los despidos por necesidad de la empresa continúan aumentando de forma sostenida. Los expertos coinciden en que las cifras de este tipo de desvinculaciones seguirán increméntandose en el futuro, debido, entre otros factores, al debilitamiento de la actividad económica, lo que finalmente afectaría al empleo.
En concreto, de acuerdo a los últimos datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en el trimestre móvil noviembre 2022-enero 2023 el número de ocupados llegó a los 9.008.546 su mayor nivel desde el trimestre noviembre 2019-enero 2020 (prepandemia), cuando la cifra de fue de 9.063.374.
En tanto, con respecto a las desvinculaciones, según el último registro de cartas de aviso de término de contrato de trabajadores con un único empleador elaborado por la Dirección del Trabajo, en enero de 2023 hubo 42.999 despidos por causa de necesidad de la empresa, lo que es un 5,5% más que en diciembre de 2022, cuando la cifra llegó a 40.765. Además, la cifra de enero es superior en 21,8% con respecto al mismo mes del año pasado, cuando los despidos por necesidad de la empresa alcanzaron los 35.303.
Por su parte, el total de cartas de despidos también muestra variaciones. En enero los despidos fueron 248.363, siendo este número menor en 3,1% con respecto a diciembre de 2022, cuando la cifra llegó a los 256.385. Sin embargo, comparando con enero de 2022, cuando los despidos totalizaron 241.617, constituye un 2,8% más.
Juan Bravo, director del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP), señala que hubo once meses consecutivos de alzas interanuales, lo que estaría alineado con la evolución de la situación económica, “la cual fue empeorando a lo largo de 2022 y que continúa extremadamente debilitada en el inicio de 2023″.
Lo anterior, dice, implica menor producción y por ende, menor necesidad de contar con trabajadores para el proceso productivo. “Esto genera dos efectos: por una parte, se reducen las necesidades de contratación y, por otra, aumentan las desvinculaciones. Esto último es lo que refleja la evolución de los despidos por necesidades de la empresa”, sostiene.
Por su parte, Ingrid Jones, economista de Libertad y Desarrollo (LyD), afirma que si bien los despidos totales son algo menores al registro del mes de diciembre de 2022, es una cifra muy por sobre el promedio de los años recientes. Además, señala que los datos indican que los sectores más afectados son la construcción, los servicios de apoyo administrativo y el comercio, “lo que refleja los ajustes que estos sectores sufren debido al menor crecimiento económico”.
Proyecciones al alza
Con respecto al futuro de las desvinculaciones por necesidad de la empresa, los expertos concuerdan en que estos seguirán aumentando durante el año.
El director del OCEC-UDP asegura que aquello ocurrirá en la medida que la actividad económica siga “profundamente debilitada”. En consecuencia, proyecta que las perspectivas apuntan a que el mercado laboral seguirá debilitándose en los próximos meses, y especialmente hacia el segundo trimestre de 2023, en donde los diversos indicadores del mercado laboral mostrarían un mayor deterioro.
En esto último concuerda la economista Cecilia Cifuentes, académica de la Universidad de Los Andes, quien manifiesta que las probabilidades de que haya una mayor debilidad en el mercado laboral son altas. Esto, “en la medida en que las cifras de crecimiento van a ir siendo más modestas y que se espera una caída en la inversión. Eso afecta el empleo, así que probablemente en los próximos meses vamos a ver una situación de mayor debilidad, aunque sin llegar a niveles críticos”.
Asimismo, la economista estima que los despidos por necesidad de la empresa aumentarán ligeramente por encima de años anteriores, considerando “una situación de una economía más desacelerada y también un proceso de transformación digital. Y con todo lo que está pasando en el comercio, de automatización”.
En tanto, David Bravo, economista y director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales de la UC, también anticipa que este 2023 será un año de lento crecimiento en el empleo, acorde con la desaceleración económica. Con respecto a los despidos por necesidad de la empresa, concuerda en que “deberían tener un alza moderada durante este año”.
Finalmente, Jones indica que la mayor cantidad de despidos que se esperan hacia el segundo trimestre, será “resultado de una menor inversión y del crecimiento negativo que se espera registre la economía chilena en los meses siguientes”.