Chile sigue enfrentando importantes brechas de género en el mundo laboral. Según el VI Reporte de Indicadores de Género en Empresas, las mujeres representan el 39,6% de la fuerza laboral, pero solo el 25,6% en cargos de gerencia de primera línea y el 22,1% en directorios.

Ante esta realidad, el conversatorio titulado “¿Están en juego la Diversidad, la Equidad y la Inclusión?” reunió a destacadas voces del sector: Francisca Jünemann, presidenta ejecutiva de ChileMujeres; Johana Trureo, gerenta de Personas de Astara; Nicolás Goldstein, Country Managing Director de Accenture Chile and Hispanic South America; y Fernanda Vicente, directora de Scotiabank Chile.

Los desafíos para mantener la DEI en las empresas

Los panelistas abordaron las razones detrás del debilitamiento de las políticas DEI en algunas compañías, advirtiendo sobre el riesgo de retrocesos motivados por intereses políticos o económicos. También destacaron que los directorios deben asumir un rol activo en la promoción de estas iniciativas para evitar que queden relegadas.

Francisca Jünemann alertó sobre la necesidad de repensar la meritocracia dentro de estos programas para evitar que se conviertan en un punto de controversia:

“Nadie se puede oponer a la igualdad de oportunidades y condiciones laborales justas de acuerdo a los méritos. Ese debe ser el nuevo relato”.

Por su parte, Johana Trureo destacó los avances logrados en la industria automotriz a pesar de su baja representación femenina. En Astara, el 46% de las contrataciones del último año fueron mujeres, lo que refleja el impacto de políticas enfocadas en la equidad de género.

Desde una perspectiva global, Nicolás Goldstein reconoció que la disminución de políticas DEI representa un desafío, pero también una oportunidad para corregir aspectos donde la meritocracia no ha sido aplicada correctamente:

“La DEI es clave en las organizaciones del futuro porque permite diversidad de pensamiento, lo que se traduce en innovación y crecimiento”.

Finalmente, Fernanda Vicente subrayó la importancia de actualizar las estrategias empresariales en materia de diversidad y equidad, asegurando que este tipo de avances generan mayor valor en las organizaciones.

Un compromiso que debe continuar

El caso de Scotiabank fue destacado como un referente en políticas de equidad de género. El banco ha logrado reducir su brecha salarial de género a solo un 1%, muy por debajo del promedio nacional, gracias a una sólida política de diversidad e inclusión.

El conversatorio dejó en claro que, en un momento en el que algunas compañías están retrocediendo en materia de DEI, es crucial que las empresas y sus directorios refuercen su compromiso con la equidad y la inclusión, no solo como una responsabilidad social, sino como una estrategia clave para su crecimiento y sostenibilidad en el tiempo.