Uno de los temas que el mercado y los expertos estaban esperando respecto de la reforma previsional, era que el gobierno profundice sobre la sustentabilidad que proyectan para Fondo Integrado de Pensiones (FIP), y los supuestos que usaron para hacer dichos cálculos.

Y finalmente este martes acudió la directora de Presupuestos, Javiera Martínez, a la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados para explicar todos los números. Ahí recordó cuáles son los beneficios que entregará este fondo, explicó la evaluación de sustentabilidad, y mostró los supuestos y datos que dan origen a cada uno de los modelos.

Entre otras cosas, señaló que la estructura del fondo queda determinada por sus ingresos y egresos, y que la tasa necesaria es resultado de la composición de los ingresos y egresos en el tiempo.

Al respecto, Martínez puntualizó que “lo que propone el proyecto de ley es la generación de un endowment, porque la tasa esperada depende de la inversión de los ingresos. ¿Y qué es lo que nos dice la evidencia comparada que es la mejor manera de maximizar esa tasa esperada? Es justamente el modelo de endowment, porque permite una mejor rentabilidad en el largo plazo”.

Sobre ello, recordó que hay que “construir este sistema pensando en un horizonte de 75 o 100 años, y lo que la literatura dice es justamente que la generación de un endowment en los tiempos tempranos del fondo es lo que genera la mejor manera de tener la mejor rentabilidad a largo plazo”.

¿Cómo funciona este endowment? La directora de Presupuestos explicó que “tiene tres etapas, la primera es para llegar a un capital crítico del endowment de US$8.000 millones, en este periodo la rentabilidad asociada a esto es 1,5%, es decir, se espera una rentabilidad relativamente baja, o los supuestos están construidos de una manera bastante conservadora”.

Luego, detalló que “antes de llegar a su maduración total, se supone una rentabilidad del 0,8% más o menos por ocho años en promedio. ¿Qué pasa en esta estructura? Que luego, cuando cumple esa etapa de maduración, la rentabilidad del endowment puede alcanzar entre 400 y 500 puntos base sobre el activo libre riesgo, y esto es como 4% o 5%”.

Eso sí, aclaró que “aquí también es importante (mencionar) que en todos los modelos, y para poder ir configurando los distintos beneficios, también supusimos que nunca le podemos exigir a este fondo que tenga una rentabilidad mayor a 4,5%, o sea, nunca podemos hacer depender la sustentabilidad del fondo a una rentabilidad mayor a 4,5%. Si tiene más, bienvenida sea, pero en el fondo, nuestros cálculos siempre están considerando que no se haga exigible en ninguna parte, ningún año, esa rentabilidad de 4,5%. Aunque el fondo, tal como está construido, puede llegar a esa rentabilidad”.

En las conclusiones, Martínez reforzó que “la rentabilidad requerida del FIP en el largo plazo es de 3,9% para su sustentabilidad”, y que “el fondo incluso podría, según el modelo de endowment que está propuesto en el proyecto de ley, podría llegar al 4,5%, pero nosotros no hicimos ningún cálculo exigiendo un 4,5% de sustentabilidad del fondo, para ser mas conservadores. Y por otra parte (...) si ocupáramos el criterio más básico de sustentabilidad, el fondo necesitaría una rentabilidad del 2,6%. Pero finalmente, por los criterios que nosotros nos autopusimos, la rentabildiad requerida en el largo plazo sería de 3,9%”.

Su presentación también recalcaba que “en un escenario de 2% de rentabilidad colectiva y con la configuración de los beneficios indicados en el proyecto de ley, el nivel de ahorro necesario en el FIP alcanzaría cerca del 35% del PIB”.