Austero. Esa es la palabra que mejor define a Guillermo Pattillo. El director del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) enfrenta hoy uno de los momentos más complejos de la institucionalidad y, por cierto, de su carrera como economista. Su llegada el 16 de abril de 2018 pasó casi inadvertida. Sin anuncios nuevos, se limitó a seguir el cronograma de trabajo fijado con anterioridad por su antecesora, Ximena Clark. Sin embargo, de manera silenciosa y sin publicidad comenzó a aplicar al interior de la entidad lo que más sabe hacer: política fiscal.
Así, una de sus primera "obras", ha sido apretar el cinturón, y hacer frente a un déficit de $ 500 millones que el INE arrastraba desde el año pasado. "Siempre se pueden hacer esfuerzo", señaló el jueves al entregar la cuenta pública de su institución. De hecho, mencionó que en la entidad nadie tiene un teléfono celular a nombre del INE. No ocupa auto institucional y se traslada en metro. "No necesito que nadie me lleve a ninguna parte", ha sido una de sus frases más frecuentes.
Quienes han trabajado con él señalan que tiene el "espíritu Dipres", por su paso por esa institución en el primer gobierno de Sebastián Piñera. Por ello, siempre está buscando la fórmula para ahorrar y ser más eficiente con los recursos.
Un ejemplo de aquello es que disminuirán los montos asignados a viáticos, horas extraordinarias y jornadas nacionales. Además, se estableció que las actividades de coordinación nacional se efectuarán mediante videoconferencias y aquellas que deban ser presenciales se desarrollarán en instalaciones de la institución.
No tiene problemas para formar equipos, pero tampoco le gusta "llenarse de gente". También lo definen como "solitario" y alejado de la prensa y los medios de comunicación. De hecho, cuando asumió el cargo, lo hizo solo. Días después nombró a su jefe de gabinete. Su único nombramiento en 2018. En 2019 cambió a todos los subdirectores.
Pattillo es ingeniero comercial de la Universidad de Concepción, y M. Phil. in Monetary Economics de la Universidad de Glasgow, Escocia. Si bien no es experto en estadísticas para hacerse cargo del INE, sus conocidos comentan que es "estricto" y "riguroso", y por ello afirman que si Pattillo se formó la convicción de que había indicios de manipulación del IPC, es porque debe haber antecedentes concretos. No obstante, otros cercanos añaden que se apresuró en calificar este hecho como manipulación sin esperar la investigación completa del caso.P