Un leve retroceso de 0,2% registraron en enero las licencias médicas electrónicas (LME) por enfermedad o accidente común emitidas con pronunciamiento, registrándose un total de 573.349, lo que se compara con las 574.443 que se emitieron en enero de 2023.

Así lo revela el último reporte de la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso), donde es posible ver un comportamiento dispar entre el asegurador público y los privados. Esto, porque las licencias por enfermedad o accidente común emitidas con pronunciamiento en Fonasa marcaron un alza de 1,7% interanual, sumando 479.525. En cambio, en las de isapres se registró una baja de 9%, versus igual mes del año previo, anotando 93.824.

El exsuperintendente de Salud, Patricio Fernández, comenta que la razón por la cual suben las licencias en Fonasa, es porque el asegurador público “carece de una contraloría médica que haga un análisis más profundo en cuanto a su aprobación, a diferencia de lo que ha ocurrido en las isapres, donde ha habido una mayor fiscalización, y también un mayor rechazo y reducción de licencias médicas. Por lo tanto, hay un desincentivo a hacer uso de licencia médica en isapres, versus lo que ocurre en Fonasa”.

De hecho, la tasa de rechazo en isapres fue de 19% en enero, mientras que en Fonasa fue de 7%. “Un 9% del total de licencias con pronunciamiento emitidas en enero del año 2024 han sido rechazadas (considerando el último estado de la licencia al 17 de febrero de 2024), cifra que para el año 2023 alcanzó el 8,4%. Sin embargo, es importante señalar que esta diferencia va a disminuir con el pasar del tiempo, ya que, de acuerdo a lo establecido en la legislación, las licencias rechazadas pueden ser apeladas y, por tanto, revertidas en el futuro. Este hecho dificulta hacer comparaciones precisas entre años”, asegura el documento de la Suseso.

Pero otro factor relevante a destacar, es que al desagregar las cifras totales, se obtiene que las licencias aumentaron en todos los grupos de diagnóstico, con excepción del Covid-19. Los mayores aumentos se registraron en enfermedades respiratorias, ya que totalizaron 41.672 en enero recién pasado, esto es un alza de 25,1% en 12 meses De esta manera, este tipo de licencias pasó de representar un 5,8% del total en enero de 2023, a 7,3% en enero de este año.

Le siguieron las licencias por enfermedades infecciosas y parasitarias, que sumaron 31.821 en el primer mes del año, un incremento de 24,5% en el periodo analizado. Así, subieron su participación en el total de licencias, desde 4,4% a 5,6%. Luego se ubicaron las licencias por enfermedades digestivas, que en enero llegaron a 29.602, un aumento de 7,3% versus igual mes del año previo. Eso significa que si en enero de 2023 concentraron el 4,8% del total de licencias, en el arranque de este año representan un 5,2%.

En el cuarto lugar se situaron las licencias por trastornos mentales, que son las que tienen el mayor peso en el total de licencias. Estas cerraron enero en 208.363, un alza de 6,8% versus enero de 2023, lo que significa que subieron su participación desde 33,9% a 36,3%.

Al respecto, el reporte señala “que la distribución de las LME con pronunciamiento emitidas durante el año 2024 es similar a la observada durante el año 2023, donde las licencias por trastornos mentales concentran más de un tercio de las LME emitidas en enero de ambos años. A su vez, se observa que las licencias por Covid-19 concentraron sólo el 1,1% del total de las LME emitidas en enero de 2024, seis puntos porcentuales menos que lo registrado en enero del año 2023″.

Lo anterior, considerando que el mes pasado las licencias por Covid-19 totalizaron 6.321, con una caída de 84,6% con frente a igual mes del año anterior.

Por otro lado, el informe de la Suseso también muestra que “para todos los grupos de diagnósticos, excluyendo trastornos mentales, el número promedio de días autorizados disminuyó en enero del año 2024 en comparación a enero del año 2023. A su vez, se observa que las licencias por trastornos mentales y traumatismos son las de mayor duración, promediando 19,1 y 17,5 días, respectivamente, en enero del año 2024″.

Al ver las tasas de rechazo según grupo de diagnóstico, se obtiene que las mayores, tanto en Fonasa como en isapres, se registran en las enfermedades por trastornos mentales. En las aseguradoras privadas dicha tasa de rechazo alcanzó el 41,7%, mientras que en el asegurador público fue del 12,1%.