Una combinación de factores mantiene al alza la cotización del dólar en el mercado doméstico, comportamiento no muy alejado al que ha tenido la divisa frente a otras monedas y que tiene un origen principal: la guerra comercial entre EEUU y China. A esto se suma la debilidad de las economías del "barrio", particularmente Argentina y las medidas recientes para evitar la fuga de divisas, y en menor medida Brasil, con una economía debilitada, las más importantes del cono sur.
Así, el dólar cerró el viernes en $712,3, marcando tres días de retroceso en que perdió $13,5 en su cotización.
Con todo, acumula de enero a la fecha un alza de $18,3, equivalente a 2,64%, con un peak de $725,8 el pasado 3 de septiembre.
Cabe recordar que el 1 de agosto la divisa traspasó la barrera de los $700 y desde entonces se ha mantenido sobre ese nivel a diferencia de períodos anteriores en que retrocedía.
De hecho, durante la semana pasada se consultó al Banco Central acerca de posibilidades de intervención en caso de una escalada de precios.