Los primeros indicadores para la economía de China muestran que el ritmo de expansión se desaceleró por cuarto mes en agosto, lo que pone de manifiesto la presión para que el gobierno impulse las políticas favorables al crecimiento.

Los datos sugieren que la economía se debilitó aún más debido a que la demanda de los socios comerciales perdió impulso, y la caída en los precios de las acciones reflejó un empeoramiento en la percepción, según un indicador de Bloomberg Economics que agrega los primeros indicadores disponibles sobre las condiciones comerciales y la percepción del mercado.

En medio de los crecientes temores sobre una guerra comercial, los responsables de la creación de políticas han dado a conocer medidas para impulsar la construcción de infraestructura y el crédito a empresas más pequeñas, así como recortes de impuestos. Tales medidas demorarán en tener realmente un efecto, por lo que la desaceleración probablemente continuará, aunque los analistas están buscando evidencia de una mejor percepción en los mercados de materias primas.

Le tomará al menos unos meses más a la economía tocar fondo y comenzar a recuperarse, de acuerdo con el economista jefe de Bloomberg para Asia, Chang Shu, quien aún no prevé ningún impacto de las medidas del gobierno. "Es como un gran barco: demorará un poco en cambiar su curso".

Los primeros datos oficiales para agosto, el índice de gerentes de compras (PMI, por sus siglas en inglés) para los sectores manufacturero y no manufacturero, se darán a conocer el viernes a las 9 a.m. Ambos registrarán una leve disminución, según los economistas encuestados por Bloomberg.

También es menos probable que la demanda externa respalde la economía. Los aranceles de Estados Unidos afectarán las exportaciones chinas y, además, hubo un deterioro en el promedio ponderado de las lecturas preliminares del PMI de socios comerciales como EE.UU., la Unión Europea y Japón.

La percepción empeoró en el mercado bursátil, ya que el índice referencial compuesto de Shanghái había caído este mes un 5,1 por ciento el viernes. Los desarrolladores inmobiliarios se encontraban entre los que obtuvieron peores resultados, ya que los buenos datos de ventas generaron preocupaciones de que se podría ajustar la política para el sector.

Sin embargo, hay señales de un lado positivo. Si bien el promedio ponderado de tres meses del índice Standard Chartered Plc para pequeñas y medianas empresas indica un sesgo de debilitamiento, la lectura de agosto se recuperó de 55,7 a 56,6.

"Las medidas para impulsar los préstamos a las pymes desde julio parecen estar teniendo efecto", según una nota de Shen Lan, economista en Pekín de Standard Chartered, a cargo de la encuesta a más de 500 empresas más pequeñas. "Agilizar el mecanismo de transmisión de política monetaria y reducir los costos de endeudamiento para las pymes sigue siendo clave para mejorar los servicios financieros para las pymes".

El banco central de China ha reducido el coeficiente de reservas tres veces este año, en parte con el objetivo de canalizar fondos para compañías más pequeñas que enfrentan dificultades para obtener créditos. El desempeño de los exportadores más pequeños se debilitó en medio de las tensiones comerciales, mientras que las empresas centradas en el país se fortalecieron, según Shen.

Luego de que el gobierno aumentara el respaldo para el gasto en infraestructura, los precios del mineral de hierro comenzaron a recuperarse. Ese repunte en la percepción también se vio reflejado en las encuestas que realizó Macquarie Securities Ltd. con productores y comerciantes de acero y cobre con sede en China, los que apuntan a una demanda estabilizada y una mejor percepción, según Larry Hu, economista del banco con sede en Hong Kong.

"Podríamos ver que la inversión de activos fijos en infraestructura y el crecimiento crediticio tocarán fondo este mes o el próximo", escribió Hu en una nota.