¿El FMI tiene una visión mucho más negativa para Chile para este año y se diferencia tanto de lo presentado por el Banco Central y el mercado, ¿a qué cree que se deba esta diferencia?

-Efectivamente, la mirada del FMI es más negativa. Reconoce que existe una alta incertidumbre. Buena parte de la visión se sustenta en los supuestos que se planteen respecto a los impactos de las restricciones sanitarias en el uso de la capacidad instalada de la economía y el momento en que comiencen a flexibilizarse la medidas aplicadas para contener los contagios.

¿Cuál es su escenario base para este año y el próximo? ¿Cuáles son los riesgos?

-Contemplamos una contracción de 2,2% en el PIB este año y un repunte hacia una expansión de 4% el próximo. Los riesgos se vinculan principalmente al momento en que se comience a normalizar el funcionamiento de la economía, y la capacidad para recuperarse del golpe. Las medidas económicas de apoyo que se han ido adoptando apuntan precisamente a esto último. Se ha buscado que el daño provocado por la crisis sea lo más acotado posible, pero una vez que pase la emergencia habrá que calibrar los efectos que en definitiva produjo.

¿Primará la incertidumbre durante este año?

-Es clave la forma en que el mundo va a comenzar a levantarse, entendiendo que somos una economía altamente dependiente de los desarrollos globales. Las medidas que se han ido adoptando también contribuyen a que el repunte sea más bien rápido, pero probablemente los organismos multilaterales, como el FMI y Banco Mundial, deberán jugar un rol fundamental, en especial en el mundo emergente.

Si bien la caída es fuerte este año, el FMI ve una recuperación importante para 2021, ¿la suscribe?

-La fuerte recuperación que proyecta el FMI se sustenta en que las masivas medidas de impulso fiscal y monetario que se han aplicado en buena parte de las economías del mundo, permiten sostener las bases para un repunte rápido, al apuntar a los sectores más vulnerables. Al mismo, tiempo, ve una contracción más profunda este año, por lo que su mirada es coherente. De nuestro lado, sin embargo, vemos un impacto de la crisis sanitaria algo menor para este año y, en línea, una repunte en 2021 más moderado. Pero como bien he señalado, la incertidumbre es muy alta, por lo que no es descartable un escenario con un golpe más potente como el que dibuja el FMI.

A nivel global el FMI proyecta una expansión de -3%, ¿comparte ese análisis?

-Nuestra visión es menos pesimista, aunque, dada la alta incertidumbre que se advierte, la posibilidad de una cifra como la que plantea el FMI es perfectamente factible.

El FMI aplicó recortes a las economías de Italia, España y Alemania para las que ahora se anticipa contracciones de 9,1% y 8%, y 7% respectivamente, ¿qué impacto tiene eso para la zona euro y el mundo?

-Es un impacto muy potente. Una caída tan pronunciada conlleva que la región se vea extremadamente debilitada. La zona euro representa entre 15% a 20% del PIB Mundial, lo que da cuenta de un efecto profundo en la economía global. Se contempla, junto con la fuerte contracción de este año, un repunte importante hacia el próximo año, lo que contribuiría a la recuperación que se prevé para el mundo en 2021.

¿Qué China logre pese a todo crecer 1,2%, es una buena noticia para Chile?

-China es nuestro principal socio comercial. Es, además, el mayor consumidor de productos básicos a nivel global. Acorde con ello, ver que, a pesar de todo, su economía mantiene una expansión, es algo positivo. Sin embargo, para los registros de China y su potencial, se trata de una cifra muy pobre. No descartaría que sus autoridades anuncien medidas más contundentes en lo próximo, especialmente del lado fiscal.