De dulce y agraz fue el dato de empleo en EEUU. Es que la mayor economía del mundo creó 199 mil nuevos puestos de trabajo no agrícolas en el mes de diciembre de 2021, bastante menos que los 249 mil (revisados) de noviembre.

Además, la cifra reportada por el Departamento de Comercio de EEUU se ubicó por debajo de las proyecciones de los analistas que en promedio esperaban en torno a 450 mil nuevos empleos.

Desde que comenzó la recuperación laboral y económica en mayo de 2020, EEUU ha recuperado 18,79 millones de empleos no agrícolas, más del 82% de los puestos de trabajo que se destruyeron con la crisis, informó Europa Press.

Sin embrago, todavía tiene que recuperar 3,57 millones de empleos para volver a los niveles que registró el mercado de trabajo antes del impacto del Covid-19.

La buena noticia vino por el lado del desempleo porque la tasa se ubicó en apenas 3,9% (ver gráfico), mejor al 4,2% de noviembre y al 4,1% que habían calculado los analistas consultados por Bloomberg. Se trata del nivel más bajo de la desocupación desde febrero de 2020 (3,5%).

De acuerdo a Bloomberg, las últimas cifras de empleo sugieren que, a pesar de que la demanda de mano de obra sigue siendo sólida, los factores que han frenado la contratación durante el otoño (falta de cuidado de niños, temores de virus, grandes colchones de ahorro) persistieron a fines del año pasado.

La variante ómicron, que llevó los casos de Covid-19 a niveles récord en los últimos días, es otra arruga y representa un riesgo para el ritmo de crecimiento del empleo a principios de 2022.

En un contexto de inflación acelerada, la caída de la tasa de desempleo y el crecimiento más rápido de los salarios pueden justificar un endurecimiento más rápido de la política monetaria. Los funcionarios de la Fed señalaron en su reunión de diciembre que puede estar justificado aumentar esa tasa “antes o a un ritmo más rápido de lo que los participantes habían anticipado”.