La Coalición de Productores de Vidrio de Estados Unidos (GPC por su sigla en inglés) informó el martes a la secretaria de Comercio de ese país, Gina Raimondo, el retiro de su solicitud de aplicación de derechos antidumping sobre “ciertas botellas de vino de vidrio” importadas de Chile, una petición que había generado una investigación del Departamento de Comercio estadounidense en diciembre de 2023 y que había sido acogida en agosto de 2024, cuando esta repartición gubernamental propuso tasas arancelarias sobre productos de las empresas nacionales Cristalerías Chile, Cristalerías Toro y Verallia. El sistema americano incluye dos investigaciones distintas: la Comisión de Comercio Internacional (International Trade Commission, ITC) determina la existencia o no de dumping y el Departamento de Comercio fija las tasas en caso de ratificarse aquello. Con el retiro de la petición de parte de los productores estadounidenses, el caso termina, dicen abogados chilenos que participan en el caso.

En la carta enviada a las autoridades de Estados Unidos, firmada por el bufete Buchanan Ingersoll & Rooney, la agrupación aclara que su solicitud sigue en pie respecto a las botellas importadas de China y México, sobre las cuales también pesaba la acusación. De hecho, el retiro de la demanda contra Chile es justamente porque la agrupación pretende que el gobierno estadounidense centre su preocupación en las importaciones de esos países, que han elevado fuertemente su participación de mercado al no contar con estas medidas de protección, ya que han ocupado la posición que antes tenían los productos chilenos. Recientemente, el ITC se había pronunciado sobre el caso chino y determinó que no existía dumping. Sobre Chile estaba previsto una resolución para enero de 2025.

“El solicitante pide que el Departamento de Comercio de los Estados Unidos ponga fin a su investigación de aranceles antidumping sobre ciertas botellas de vidrio para vino de Chile”, dijo el documento. “El solicitante es consciente de que este es un suceso extraordinario en el curso de esta investigación. La industria doméstica está dando este paso debido a su necesidad imperiosa de alivio de las importaciones injustamente ofrecidas por China y México, dada la decisión de este año de la Comisión (de Comercio Internacional) de denegar el alivio de las importaciones subsidiadas de las mercancías en cuestión provenientes de China”, explicó.

La noticia fue un regalo de fin de año para las compañías chilenas, dado que sin esta acusación encima, podrán retomar sus envíos de botellas de vino a ese país.

“Estamos muy contentos con esta resolución, que esperábamos que fuera a favor nuestro. Es importante, porque nos abre de nuevo las puertas del mercado americano para volver a exportar botellas de vino”, dijo Francisco Ruiz, gerente general de Cristalerías Toro.

El retiro de esta acusación, tal como lo dicen los propios abogados de la agrupación GPC, es completamente inusual. De hecho, los asesores legales de Cristaltoro en EE.UU. también resultaron sorprendidos con la movida, pese a que tenían una fuerte convicción de que ganarían el caso, después de que la Comisión de Comercio Internacional (ITC, por sus siglas en inglés) le negara las medidas arancelarias que los productores estadounidenses habían pedido contra las importaciones chinas. “Ha ocurrido un hecho inusual en la investigación. Ayer, el solicitante retiró la petición contra Chile completamente”, comunicaron los abogados norteamericanos a sus clientes de Cristaltoro.

En Cristalerías Chile no estuvieron disponibles para comentar la noticia, aunque la decisión en Estados Unidos fue comunicada también a los asesores locales de la compañía controlada por el grupo Claro.

Con esta movida, el caso contra los productores chilenos termina oficialmente, sin esperar la votación de la ITC sobre las medidas arancelarias contra Chile esperada para enero.

Esto, porque la Coalición de Productores de Vidrio de Estados Unidos espera ahora que la investigación de la ITC se centre en China y México, y así reevalúe sus cifras para luego emitir un pronunciamiento positivo a su solicitud.

De acuerdo a los documentos que abrió al público el Departamento de Comercio en agosto, las botellas de vidrio chilenas de 750 cc se venden en todo el territorio estadounidense, entran por los puertos de la costa oeste, y entre 2020 y 2022, los años que abarca su indagatoria, aumentaron sus ventas pasando desde US$16,3 millones a US$ 35,5 millones. Los dos principales importadores de botellas chilenas fueron las empresas locales TricorBraun y Berlin Packaging. Esta última firma fue la empresa que mayores antecedentes aportó a la investigación, en la que además participaron otros 12 importadores.

El caso comenzó a tramitarse en diciembre de 2023, tras una denuncia de la GPC, una agrupación gremial compuesta por la gigante del sector Ardagh Glass Inc. de Indianápolis, además del Sindicato Internacional de Trabajadores del Acero, Papel y Silvicultura, Caucho, Manufactura, Energía, Industrias Aliadas y Servicios.

La denuncia afecta a los fabricantes chilenos, mexicanos y chinos, que explican en conjunto el 25,6% del valor de las exportaciones globales de botellas de vidrio para vino.

Según los documentos del caso del Departamento de Comercio, China fue el mayor exportador global de botellas de vidrio para vino en 2022 y representó el 20,7% del total de las exportaciones mundiales en términos de valor. México, era entonces el quinto mayor vendedor global, con el 4,3%, mientras que Chile apenas alcanzaba al 0,6%. Aunque los chilenos son un oferente importante de la industria vitivinícola en California, su cuota de mercado no superaría el 3,5% del total, compitiendo con fuerza con los productores europeos, principalmente.

Al anunciar la investigación, el pasado 5 de agosto, el Departamento de Comercio anunció tasas arancelarias preliminares de un 173,91% para los productos vendidos por Cristalería Toro; 34,46% para los de Cristalerías Chile y 6,64% para los de Verallia.