En 2022 el número de Licencias Médicas Electrónicas (LME) emitidas tanto en isapres como en Fonasa fueron 10.022.943, lo que significa un incremento de 13,8% respecto a las 8.808.755 LME emitidas en 2021. En tanto, las licencias médicas emitidas y pronunciadas alcanzó a 9.283.961, lo que representa un alza de 14,7% respecto al año 2021.
Eso es lo que revela el informe anual de emisores de Licencias Médicas Electrónicas (LME) de 2022 elaborado por la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso), donde muestra que alrededor de 93% de las LME emitidas en 2022 han sido pronunciadas por las contralorías médicas a la fecha en que se realizó el documento.
Eso sí, en las cifras que muestra el estudio no se incluyen las licencias médicas emitidas en papel, que según estima la Suseso, en 2022 podrían ser alrededor del 2% del total, y en 2021 eran el 5%, por lo que no son años estrictamente comparables, pero sí se pueden obtener variaciones aproximadas.
Las cifras
De las licencias que están con pronunciamiento, el documento muestra que el 78,5% corresponden a Fonasa (7.286.284) mientras que en isapres es un 21,5% (1.997.677). Algo similar a lo que ocurrió en 2021, donde un 79,4% eran de Fonasa y un 20,6% de isapres.
Al ver los principales grupos de diagnósticos donde se concentraron las LME con pronunciamiento, se obtiene que los asociados a trastornos mentales, Covid-19, enfermedades musculoesqueléticas y enfermedades respiratorias representan aproximadamente el 70% del total de LME pronunciadas para los años 2021 y 2022.
En 2022, trastornos mentales lideró con el 29,7% del total, le siguió Covid-19 (16,8%), musculoesqueléticas (16%), respiratorias (9,4%), traumatismos (5,8%), digestivas (3,7%), infecciosas y parasitarias (3,2%), sistema nervioso (2,7%), y otros diagnósticos (12,6%).
“Los diagnósticos asociados a Covid-19 y enfermedades musculoesqueléticas presentan una disminución en su proporción en 2022. Por otro lado, las enfermedades respiratorias muestran un alza en el año 2022, donde éste último aumentó más de 2 veces el valor del año 2021″, señala el documento.
Con todo, “las tres regiones con mayor proporción de LME con pronunciamiento en ambos años fueron la Región Metropolitana, Valparaíso y Biobío, lo que es consistente con la distribución poblacional del país. Por su parte, las tres regiones con menores participaciones, en ambos años, fueron Aysén, Arica y Parinacota y Magallanes”, dice el informe.
Profesionales que emiten LME
El informe también evalúa a los profesionales que emiten licencias médicas, pero en este apartado se excluyen las LME emitidas por aquellos profesionales de la salud que tienen autorización por parte de la Seremi de Salud para emitir altos volúmenes de licencias asociadas a Covid-19 “y, en caso que corresponda, Licencias Médica Preventiva Parental (LMPP)”, dice el informe.
Y agrega que “con esta restricción, el número de profesionales excluidos son 2.130 para el año 2021 y 2.047 para el año 2022 los cuales emitieron 1.108.279 y 769.673 LME, respectivamente”.
Bajo este escenario, el número de LME con pronunciamiento que son parte del análisis corresponde a 6.987.591 para el año 2021 y 8.514.288 para el año 2022. Estas fueron otorgadas por 38.869 y 43.635 profesionales de la salud en 2021 y 2022, respectivamente. Eso significa 180 licencias promedio anuales en 2021 por profesional de la salud, y 195 promedio en 2022.
Por otro lado, el número de trabajadores que tuvieron LME son 2.320.885 para 2021 y 2.922.696 para 2022. Eso significa que hubo tres LME por año en promedio por trabajador que hizo uso de una licencia médica.
Al ver “la frecuencia relativa acumulada del número de profesionales de la salud emisores por tramos de licencias para el año 2022, se observa una alta concentración en el rango de licencias menores a 200 (76,0% de los profesionales). En contraste, el 1% de los profesionales emite entre 1.600 y 2.499 LME al año (440); el 0,4% emite entre 2.500 y 4.999 LME al año (178) y el 0,1% de los profesionales emite más de 5.000 LME durante el año (41)”, señala el documento.
Con todo, el documento dice que “se advierte una desproporción entre el número de profesionales, el número de LME autorizadas y el gasto en SIL estimado. Es decir, el 1,5% de los profesionales de la salud emite un 19,2% de las LME autorizadas equivalente a un 20% de gasto en SIL estimado”.
Lo anterior, considerando que el informe separa en cuatro tramos el número de LME con pronunciamiento. El primer tramo es para los profesionales que emitieron menos de 1.600 LME en 2022. Acá está el 98,5% de los profesionales, quienes concentran el 80,8% de las LME autorizadas, y el 80,0% del gasto en SIL estimado. El número de días promedio por licencia de este tramo es de 12,9.
El segundo tramo es para aquellos profesionales que emitieron entre 1.600 y 2.499 LME en 2022. Ellos son el 1% de los profesionales, concentran el 9,8% de las licencias autorizadas, y un 9,1% del gasto en SIL estimado. El número de días promedio por licencia de este tramo es de 13,2.
El tercer tramo es para quienes emiten entre 2.500 y 4.999 LME. Acá está el 0,4% de los profesionales, concentran el 6,5% de las LME autorizadas, y el 7,2% del gasto en SIL. El número de días promedio por licencia de este tramo es de 17,1.
El cuarto tramo es para quienes emiten 5.000 LME o más. Ellos representan al 0,1% de los profesionales, tienen el 3% de las LME autorizadas, y el 3,7% del gasto en SIL estimado. El número de días promedio por licencia de este tramo es de 20,7.
“Se observa que a medida que aumenta el tramo de LME disminuye el número de profesionales y aumenta el número de días promedio de las licencias”, concluye el informe. Allí también se muestra que en el año 2022 hubo una pequeña caída en el total de días autorizados, pasando de 14,8 en 2021, a 13,5 días autorizados en 2022.
También dice que “existe una relación directamente proporcional entre las licencias asociadas a trastornos mentales y los tramos de LME. Así, para el año 2021, en el tramo de profesionales que emiten menos de 1.600 LME al año, el 23,7% del total de LME autorizadas estuvieron asociadas a diagnósticos de trastornos mentales, dicho porcentaje aumenta a 84,9% para aquellos profesionales que emiten más de 5.000 LME al año. Lo contrario se observa para el resto de los diagnósticos, que disminuyen su participación a medida que se avanza a mayores tramos de LME”.
Asimismo, asegura que “si bien, el gasto en SIL estimado aumenta en 2022, la proporción de los diagnósticos asociados a trastornos mentales se mantiene cerca del 40% del gasto en SIL total estimado para ambos años. Por otro lado, en relación al 2021, los diagnósticos por Covid-19, enfermedades infecciosas, enfermedades digestivas y enfermedades respiratorias presentan un aumento en la proporción del gasto SIL estimado. Se destaca el aumento en la proporción en las enfermedades respiratorias de casi el doble de gasto en SIL estimado”.
Al ver las LME con pronunciamiento que fueron emitidas por los profesionales de la salud, según categoría de especialidad y tramo de LME, el documento enseña que a medida que aumentan los tramos, en la categoría “médico general” aumenta la proporción de LME tanto para el año 2021 como el 2022. Ellos corresponden a aquellos profesionales médicos que no registran alguna especialidad.
“Para el año 2022, se observa que para el primer tramo, el 64,6% fueron emitidas por la categoría médico general, alcanzando un 95,6% de las LME en el último tramo”, afirma. Adicionalmente, “la totalidad de las LME asociadas a diagnósticos por trastornos mentales emitidas por profesionales pertenecientes al tramo 4, no fueron emitidas por psiquiatras sino más bien por médicos generales y de otras especialidades”, concluye.
Chilenos versus extranjeros
En 2021 el 77,3% del total de profesionales de la salud eran de nacionalidad chilena. En 2022 fueron el 76,4%. Pero en realidad, antes de dar cualquier cifra sobre este asunto, la Suseso aclara en el informe que “los datos presentados a continuación no buscan en ningún caso la estigmatización de profesionales extranjeros, sino que más bien es estadística relevante a conocer, en especial contexto de las discusiones públicas desarrolladas al respecto en el último tiempo. Además, se reconoce el aporte a nuestro país de inmigrantes y en especial de muchos profesionales de la salud y en la salud pública en particular”.
Luego muestra que al distribuir el total de LME por nacionalidad del profesional de la salud, “se observa que para el año 2022, del total de LME emitidas por los profesionales chilenos, el 87,8% pertenecen a profesionales que emiten menos de 1.600 LME al año y, en consecuencia, el 12,2% pertenece a profesionales que emiten 1.600 y más LME al año. En el caso de los profesionales extranjeros, estas cifras corresponden a 67,2% y 32,8%, respectivamente. Es decir, los profesionales extranjeros que pertenecen a los tramos de 1.600 y más LME al año, emiten casi 3 veces más LME que profesionales chilenos para los mismos tramos”, dice el informe.
Y concluye que “se observa una relación creciente en la proporción de profesionales extranjeros y el aumento en el tramo de LME. Así, de los profesionales que emiten menos de 1.600 LME, el 23,1% de los profesionales tienen nacionalidad extranjera, representando un total de 9.918. En el extremo, el 87,8% de los profesionales que emiten más de 5.000 LME son extranjeros equivalentes a 36 profesionales”.