Las empresas están en el tercer lugar con respecto a la confianza de las instituciones, según el estudio Wake! desarrollado por e-press y Cadem. En el primer lugar están Carabineros y la PDI, y en el segundo, las Fuerzas Armadas.

La encuesta, realizada a nivel nacional a 1.000 personas, mayores de 18 años, de todos los segmentos socioeconómicos, confirma que si bien el sector empresarial privado está sobre otras entidades como las ONG, sindicatos y el gobierno, esta favorable evaluación no logra replicarse cuando se trata de iniciativas medioambientales para combatir el cambio climático. Es así como el 64% de los consultados cree que las acciones de las marcas en relación a la crisis climática “son sólo medidas adoptadas por interés reputacional”. Más aún, respecto de si “son un efectivo factor de cambio con impacto concreto”, sólo el 20% piensa que sí.

Además, midió la percepción de la ciudadanía sobre el involucramiento del mundo privado en temas sociales. De esta forma, el 68% de los encuestados estima que las compañías debiesen tomar un rol activo en temas de diversidad e inclusión, siendo esta cifra mucho mayor en mujeres que en hombres (75% y 60%, respectivamente). “Las personas valoran el involucramiento de las empresas en temas sociales, pero es importante que las compañías ecualicen acertadamente sus agendas sociales, cuidando promover la inclusión y la diversidad sin pasar a llevar principios relacionados con el mérito, por ejemplo, que también son consideraciones de relevancia para una parte de la ciudadanía”, comenta Carmen Luz Assadi, socia de e-press Comunicaciones.

Volviendo al ámbito del problema climático, un 84% de los encuestados considera que hay una crisis grave o gravísima.

Al respecto, la investigación reveló una importante disposición de las personas a moderar el consumo de ciertos productos frente a esta crisis climática. Así, la muestra da cuenta de que por motivos medioambientales el 78% está muy dispuesto a disminuir la compra de ropa, el 72% a reducir el gasto en productos electrónicos, el 60% a pagar más por envases sustentables y el 44% a bajar o dejar de comer carne. “Comunicacionalmente, a las empresas no les debe bastar con dejarse persuadir por sentimientos ciudadanos, sin sintonizarlos con el giro del negocio. De lo contrario, podría tensionarse la percepción que las audiencias tienen de su real intención en materia social o medioambiental”, agrega Assadi.

El análisis va más allá y consulta sobre con qué tipo de movimientos o causas se identifican los chilenos, donde el 39% lo hace con la protección de los animales, siendo el primer ítem de la lista. Sin embargo, el 51% dice no suscribir esta causa. Luego, la defensa de la propiedad privada está en el segundo lugar (36% dice que se identifica con ella), mientras que el ecologismo se ubica en el tercer puesto, con un 31% que se identifica con ella, pero el 56% señala no simpatizar con este tipo de movimientos (la cifra mayor de la lista).

“El Wake! invita al mundo corporativo a reflexionar, no sólo sobre la atención que este debe poner a las percepciones o tendencias de la ciudadanía, sino que también a entender que el esfuerzo por hacerse cargo de dichas tendencias tiene un impacto en una sociedad como la nuestra y en el día a día de las empresas, que viven un importante proceso de transformación”, concluye Roberto Izikson, gerente general de Cadem.