El Banco de Inglaterra (BoE) anunció el jueves una nueva subida de su tasa de interés hasta el 0,5% para hacer frente a la inflación más importante en Reino Unido en treinta años, principalmente a causa de los precios de la energía, y que penaliza a las familias modestas.

La inflación, que alcanzó un 5,4% al terminar 2021, debería aumentar hasta el 7,25% en abril de 2022 debido principalmente a “la subida de los precios de la energía” y se mantendrá en el 5% a medida que avance el año, estima ahora el banco central.

El gobernador del BoE, Andrew Bailey, ya dijo en enero estar preocupado por elevados precios del gas, del que el Reino Unido es un importante importador, a causa de las tensiones entre Rusia y Occidente en torno a Ucrania.

El Banco de Inglaterra advirtió que la inflación también se explica por un mercado laboral desequilibrado. “Las empresas han tenido que ofrecer salarios más altos para atraer y retener a los empleados” en el contexto de la pandemia, afirma el banco en su informe de política monetaria.