Menos de 48 horas después del acuerdo anunciado entre Codelco y SQM, algunas de las clasificadoras de riesgo encargadas de la cobertura de ambas entidades emitieron sus primeros pronunciamientos sobre la materia.
La directora corporativa para Latinoamérica de Fitch Ratings y analista de crédito senior, Alejandra Fernández, dijo que, en el caso de la estatal, las perspectivas son buenas, pero entregó ciertos matices.
“Codelco accede al negocio de litio con buenas perspectivas de crecimiento futuro. El impacto financiero en el mediano plazo dependerá de la voluntad de su dueño, el Estado de Chile, de permitir que las ganancias de ese negocio queden en su balance”, indicó a Pulso. A su juicio, existe una probabilidad “razonablemente alta” de que la cuprífera distribuya todos los beneficios al accionista, “en base al comportamiento histórico” al respecto.
El propio presidente del directorio de Codelco, Máximo Pacheco, ha esgrimido dicho argumento para explicar la apremiante deuda financiera de la estatal, que asciende a más de US$18.000 millones. “Si se nos hubiera aplicado la misma regla que a las empresas privadas, la deuda de Codelco podría ser una quinta parte de la actual”, ha dicho en más de una ocasión.
Por eso, Fernández es escéptica de que el Estado de Chile le permita a Codelco disponer de los beneficios que podría capturar durante la primera fase del acuerdo, cercano al 16% de las utilidades, entre 2025 y 2030. “Dependerá del dueño si Codelco puede disponer de esos beneficios”, remarca.
Con todo, su evaluación reafirma la respuesta favorable que ha encontrado el anuncio, ya que “permite que la productora más grande del mundo de un metal crítico para la transición energética, como es el cobre, pase a tener control sobre el otro mineral crítico, como es el litio, lo que le otorga a Codelco diversificación y una mayor importancia estratégica para el Estado de Chile”, plantea. Eso sí, apunta que “el timing es complejo” para Codelco, dada la situación productiva que también aqueja a la minera estatal, que la tiene “ejecutando un programa de inversiones que incluye proyectos de gran envergadura, que han sufrido contratiempos, retrasos y sobrecostos”.
“Esperamos que el foco sea sacar adelante su plan de inversiones, y sobre todo que su participación en el litio no le ponga presión adicional a su balance”, dice Fernández.
Moody’s sobre SQM
Por su parte, en un reporte enviado a clientes, Moody’s aquilató los impactos positivos y negativos para SQM tras el pacto suscrito.
“El acuerdo reduce la incertidumbre en torno a la extensión de las operaciones de arrendamiento de SQM en el salar de Atacama, que originalmente expiraba en 2030, y aumenta su cuota de producción, un crédito positivo. Sin embargo, SQM también cederá el control de la nueva empresa a Codelco a partir de 2031, que tiene una experiencia limitada en litio, lo que significa la renuncia a su influencia sobre futuras decisiones estratégicas, un crédito negativo”, señala.
Agrega que la creación de esta nueva alianza público-privada “se alinea con la nueva Estrategia Nacional del Litio del gobierno de Chile”, apuntando que “el control de Codelco sobre las decisiones empresariales en la nueva entidad sugiere que la dirección estratégica de la empresa estará influida por la estrategia del gobierno chileno, que podría divergir de los objetivos de SQM en el futuro”.