Rodrigo Cerda y Lucas Palacios coincidieron en Teatinos 120 en el primer gobierno de Sebastián Piñera. El primero, como coordinador macroeconómico y jefe de asesores del Ministero de Hacienda comandado por Felipe Larraín, y el segundo, como asesor de la directora de Presupuestos de la época, Rosanna Costa.
Luego se volvieron a encontrar, ya en la segunda administración Piñera, con Cerda como director de la Dipres y Palacios a cargo del Ministerio de Economía.
Hoy nuevamente vuelven a trabajar juntos. Ambos en puestos distintos y responsabilidades mayores. Si bien tienen cerca de 400 días para realizar su trabajo, no quieren dejar pasar esta oportunidad para marcar su sello.
Para ello, este lunes se reunieron con el propósito de definir lo que será su hoja de ruta, la que tendrá tres ejes. Lo primero que se estableció es trabajar como equipo económico la agenda legislativa. Esto significa que los proyectos relacionados con las carteras de Hacienda, Economía y Trabajo se desarrollarán de manera mancomunada, siendo Cerda quien las oficie de coordinador.
Fuentes conocedoras de esa reunión afirman que lo conversado apunta a que los ministros estén en conocimiento de los proyectos que cada uno tiene, ya que hay varias materias legislativas que le competen a los tres ministerios, por ende, lo que se quiere es que todos puedan saber en detalle los proyectos en curso.
Además se busca mostrar que hay un equipo detrás y no solo un ministerio. Por ello, la primera tarea es revisar los proyectos en curso para analizarlos y fijar las prioridades de este último año de gobierno.
Esto marca un cambio con la “era Briones”, señalan en el gobierno, ya que al exministro le gustaba “jugar más en solitario” y llevar adelante su cartera de proyectos sin incluir ni tampoco informar a sus colegas del equipo económico.
Si bien no hubo roces entre Ignacio Briones y Palacios, lo cierto es que no trabajaron en equipo ni tampoco hubo anuncios en conjunto. Los únicos eventos donde se vieron ambos fue al principio de la crisis, cuando se dieron a conocer algunas medidas para hacer frente a la pandemia.
Un ejemplo de este distanciamiento fue la tramitación de los proyectos Fogape 1 y 2, donde la participación de Economía fue nula, aunque esta medida tenía mucha importancia para el mundo de las pequeñas y medianas empresas. Eso es lo que, según fuentes del Ejecutivo, se quiere cambiar ahora.
De hecho, el puntapié inicial de este nuevo trato se comenzará a pavimentar a fines de esta semana, cuando ambos ministros anuncien medidas para el sector turismo.
El segundo eje de la agenda es la reactivación de la inversión a través de las empresas públicas. Y por ello, el mismo día lunes ambos se reunieron con la presidenta del Sistema de Empresas Públicas (SEP), Loreto Seguel.
“Este será un gran foco para desarrollar este año”, mencionan en el gobierno.
Esto, porque Hacienda ya fijó como prioridad avanzar rápidamente en la ejecución de la inversión pública para apuntalar la reactivación de la economía.
El tercer eje apunta a realizar un análisis de las medidas en curso que se ha implementado y, con ese diagnóstico en la mano, ver qué cambios y mejoras se pueden hacer de acuerdo a como se siga extendiendo la crisis sanitaria.