El 16 de mayo del año pasado, la multinacional Walgreens Boots Alliance (WBA) anunció la venta de Farmacias Ahumada a un consorcio de inversionistas chilenos organizado por LarrainVial. Con el paso de las horas, se explicitó que aquellos inversores los encabezaba en realidad un conocidísimo de la industria farmacéutica nacional: Guillermo Harding, quien fuera dueño de la hoy mayor cadena de boticas del país, Cruz Verde, y de su matriz, Socofar.
A sólo nueve años de vender Cruz Verde al conglomerado mexicano Femsa y alejarse del retail, dedicándose más a negocios inmobiliarios, Harding decidió volver a su industria preferida con el desafío de recomponer una compañía que había perdido el brillo y la competitividad a manos de WBA, el quinto mayor actor global del retail, con sede en Londres, pero que nunca tomó mucho en cuenta a este pequeño negocio en el confín del mundo.
Quienes lo han visto dicen que Harding, ingeniero civil mecánico de la U. Federico Santa María, de 71 años, retornó con nuevos bríos. Y que está empecinado en poner de vuelta a Ahumada “en el lugar que merece”, pues sigue siendo la marca top of mind en farmacias del público y eso no se puede perder, comentan.
Los cuatro hombres de Harding
Oficialmente, la firma Inversiones Da Vinci, que Harding controla con el 51% -a través de su sociedad holding ICC Inversiones SpA- y tiene como socios a Gabriel Ruiz-Tagle y a LarrainVial, tomó el control del 100% de las acciones de Farmacias Ahumada el 2 de noviembre. Ese mismo día se realizó la primera junta extraordinaria de accionistas de Farmacias Ahumada con sus nuevos controladores, la que estableció el capital de la sociedad en $ 143.339 millones (US$159 millones), según el acta. Antes, el 15 de octubre, Da Vinci había acordado un capital de $ 120.000 millones, el que debía enterarse en un mes de plazo.
Asimismo, la asamblea determinó que la compañía será regida por un directorio de siete miembros. La mesa ya se nombró y, extrañamente, no es integrada por Guillermo Harding, pero sí hay cuatro profesionales cercanos a él. Es presidida por Joel Lobo, mano derecha de Harding en todo lo relacionado con finanzas. De hecho, fue hasta 2016 gerente de finanzas de Socofar (la matriz de Cruz Verde) y hoy es el director financiero de ICC, firma holding de sus inversiones. Junto a él está Jorge Brenner, quien acompañó a Harding desde 1982 en la construcción de Cruz Verde y fue gerente general de esta cadena de farmacias. Y los acompañan dos abogados: Felipe Muñoz, una especie de consigliere legal de Harding, quien está encima de lo relacionado con regulación y asuntos corporativos en Ahumada, y Emilio Vásquez, socio del bufete Barros & Errázuriz, que ha asesorado a Harding desde sus tiempos en Cruz Verde, como confiesa en su biografía de la página web de la oficina jurídica.
Otro director es Aníbal Larraín, presidente de Watt’s y director de Viña Santa Carolina y Minería Activa, que representará a la casa financiera LarrainVial.
Y los otros dos son del ala Ruiz-Tagle: Felipe Baraona, quien fuera gerente general de su family office y de SCA, la sucesora de Pisa; y el propio Gabriel Ruiz-Tagle. El exministro de Deportes, expresidente de Colo Colo y excontrolador de la papelera Pisa, no lo ha pasado bien últimamente, pues la multa de 15 mil UF que recibió en 2019 por uso de información privilegiada en la venta de acciones de la sociedad administradora del club Colo Colo, Blanco y Negro, le volvió a pesar. El 25 de agosto, la Corte de Apelaciones de Santiago le impuso arraigo nacional y firma mensual tras ser formalizado como autor de tres delitos de uso de información privilegiada e infracciones a la Ley de Valores.
Levantaron gerenta de Cruz Verde
En su primera reunión oficial, el directorio “ratificó 100%”, dijo un testigo, al gerente general de Farmacias Ahumada, Juan Pablo Corvalán, quien fue nombrado en ese cargo por el dueño anterior, en diciembre de 2022, aunque había llegado en 2017 a la compañía como director de Tecnología, desde la cadena de ópticas GMO, donde llegó a ser director regional de operaciones. Corvalán ha hecho un solo cambio en su equipo ejecutivo desde la llegada de los nuevos dueños: el mes pasado le levantó a Cruz Verde a su gerenta de Recursos Humanos, Oriana Arancibia.
Una de las condiciones que los dueños pusieron para cerrar la adquisición, y que fue una de las primeras tareas encargadas a Corvalán, fue que se limpiara la compañía de las varias sociedades que operaban en su entorno, de manera de contar con una estructura más simple y clara. De ese modo, según conocedores de la transacción, los estados financieros de Ahumada demostraban que la compañía no ha perdido dinero desde hace tres años.
Es que la mano de WBA estuvo puesta en la mejora financiera. Y eso trajo costos fuertes, sobre todo en personas. La empresa pasó de tener 430 farmacias en todo el país a sólo 293 cuando la anglonorteamericana se fue.
A dos meses de esa partida, la compañía cuenta con 2.900 trabajadores, 2.400 de ellos en las farmacias, 300 en administración y 200 en su centro de distribución y en el laboratorio de recetario magistral. Y tiene una farmacia más: 294.
Pero según datos del Instituto de Salud Pública, su presencia es menor frente a los otros grandes actores. En el país, hay 5.368 farmacias. Cruz Verde lidera por lejos, con 740 locales; le siguen Salcobrand, con 440, y Dr. Simi con 330.
Y Ahumada no es dueña de ninguno de sus locales, pues todos los arrienda.
Pero dentro de la empresa ya se especula con que esto va a cambiar. El estilo de Harding en Cruz Verde era ser dueño de los inmuebles. Y su mantra, dicen, es “crecimiento, crecimiento, crecimiento”. “El ADN del nuevo dueño está en crecer, en volumen, en ubicaciones”, comenta un cercano. Por tanto, es esperable que haya varias aperturas. Una fuente con conocimiento de la firma aseguró que se abrirán unas 100 nuevas tiendas en tres años, “para poder competir al nivel de nuestros rivales”.
La industria chilena de las farmacias, dicen especialistas, se expande anualmente hasta cerca del doble del crecimiento del PIB. Para 2024 se espera que la economía crezca entre 1,25% y 2,25%, según el Banco Central, por lo tanto, el rubro debiera crecer hasta cerca del 5%, esperan. De hecho, en años anteriores, pese a que el comercio minorista se ha deteriorado, el rubro de las boticas ha seguido creciendo, dijo un ejecutivo del rubro.
Volver al logo original y convertir las farmacias en centros de salud
Pero la estrategia de crecimiento de Ahumada no es sólo abrir tiendas: también pretenden dar una propuesta distintiva de valor. Si Cruz Verde se centra en precios bajos y Salcobrand en una estética más femenina, describen, en Ahumada pretenden focalizarse en la salud como eje, para lo cual pretenden convertir sus farmacias en “centros de salud”.
Para ello, revirtieron primeramente la decisión adoptada por los antiguos dueños de modificar su logo y su “look and feel”. Alcanzaron a hacerlo en 10 farmacias, pero era un plan mucho más ambicioso que algunas fuentes cercanas a la empresa cifraron en hasta $10 mil millones. La idea era sacarle el rótulo farmacias y dejar sólo la marca Ahumada, dejar sólo colores rojo y blanco (sin azul) y borrar la tradicional figura del Hombre de Vitruvio de Leonardo da Vinci, que acompaña a su marca. Como anécdota, el hecho de que el nombre de la sociedad de los compradores se llamara Inversiones Da Vinci decía mucho sobre su interés al respecto. Así que la primera orden del nuevo directorio fue paralizar el plan y volver al origen. Es probable que en el futuro el logo se modernice, pero que sus símbolos históricos se mantengan.
Ahora, las remodelaciones de los locales, que eran también parte de ese plan, sí continuarán. Y esto incluye más iluminación, pintura y entrenamiento del personal, que seguirá vistiendo los uniformes blancos, que vinculan a la salud. La idea es potenciar la figura del químico farmacéutico como un profesional de la salud competente para asesorar al paciente, como le llaman en la empresa, e incluso incorporar a médicos o enfermerías que tengan consultas adyacentes a la farmacia. De hecho, en La Florida ya cuentan con un local de estas características: un centro de salud con dos ingresos, uno para la farmacia y otro para las consultas médicas.