El precio del dólar revirtió la tendencia inicial y cerró con una leve baja este martes mientras los inversionistas se mantenían atentos a la reuniones de política monetaria de importantes bancos centrales que se realizarán esta semana.
La moneda estadounidense bajó $2,15 a $954,50, con lo que rompió una racha de cinco sesiones consecutivas de alzas.
Entre los muchos encuentros de política monetaria el mercado local estaba especialmente atento a las reuniones de dos días que iniciaron este martes la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco Central en Chile. En ambos casos se espera que en las decisiones, que serán dadas a conocer mañana, mantengan las tasas de interés sin cambio, pero que den señales sobre próximas bajas.
A nivel global la moneda estadounidense operaba estable. El dollar index, que mide el comportamiento de la divisa frente a una canasta de seis monedas líquidas, incluyendo el euro, caía un leve 0,01% a 104,55 puntos.
Efecto del cobre
Más temprano el dólar inició las operaciones cotizándose en su menor nivel desde fines de abril arrastrado por el nuevo retroceso en los precios del cobre, la principal exportación del país, pero luego las cotizaciones a futuro del metal cambiaron de tendencia.
La cotización al contado cerró con un descenso de 1,09% a US$3,9957, anotando su menor nivel desde el 28 de marzo 2024 y ubicándose también por debajo de los US$4 la libra por primera vez desde esa fecha, ya que la preocupación por la demanda china y la incertidumbre sobre el calendario de recortes de las tasas de interés empeoraban el sentimiento especulativo hacia los metales dependientes del crecimiento.
En el mes el metal rojo acumula una baja de 7,04% y se acerca a su mayor caída mensual desde el mes de junio 2022 cuando bajó 13,22%. En el año acumula un alza de 3,9%.
Sin embargo las cotizaciones de los futuros del metal, que el mercado mira con mayor atención, subían esta tarde 0,13% a US$4, 09 la libra.
Los líderes chinos dijeron este martes que las medidas de estímulo necesarias para alcanzar el objetivo de crecimiento económico de este año se dirigirán a los consumidores, desviándose de su libro de jugadas habitual de verter fondos en proyectos de infraestructura.
“Hasta ahora, las medidas de Pekín para apoyar el crecimiento han decepcionado a los mercados y la prolongada crisis del sector inmobiliario no da señales de tocar fondo. Los inventarios mundiales de cobre se han disparado y la demanda tardará en absorberlos”, afirmó Ewa Manthey, de ING.
Un sondeo realizado por Reuters indicó el lunes que es probable que la actividad fabril china, que se conocerá el miércoles, se contrajera por tercer mes consecutivo en julio.
Se espera que la Reserva Federal mantenga las tasas estables al término de su reunión de dos días del miércoles, pero podría apuntar a una posible relajación de la política monetaria ya en septiembre.
