Ya no se trata únicamente de un motor de comercio, la inversión de China ha comenzado a desplegarse en América Latina, y Chile no ha sido la excepción. Fuera del consenso político occidental, Estados Unidos no demoró en expresar su preocupación por la creciente influencia del gigante asiático, lo que a ojos de Xu Bu, embajador de China en Chile, no tiene fundamentos.
En entrevista con PULSO, el diplomático, que este mes cumplió un año en Chile -y que ha sido considerado uno de los diplomáticos más poderosos en nuestro país-, comenta que este tipo de acusaciones no son nuevas. De hecho, relata que tuvo que encarar cuestionamientos del mismo tono con el ingreso de Tianqi a SQM.
Pero respecto a este capítulo, Xu Bu saca cuentas alegres. Cuenta que sostuvo reuniones con Julio Ponce y que conoció sus "experiencias de vida extraordinaria", y se siente confiado en que el empresario chileno podrá trabajar fluidamente con Tianqi, ahora que "están en el mismo barco".
Se han referido a usted como un "embajador poderoso", dado el nivel de contactos que ha sostenido con autoridades de gobierno y parlamentarias. ¿Qué le parece ese calificativo?
-Llegué a Chile en enero de 2018 como embajador de China en Chile, y mi deber es tomar amplios contactos con el gobierno chileno, el Parlamento, las instituciones encargadas de la economía, el comercio, la cultura, la ciencia y la tecnología, la educación, los gobiernos provinciales, y promover vigorosamente el desarrollo profundo de las relaciones de cooperación pragmática de diferentes ámbitos entre los dos países.
Como embajador, tengo que esforzarme por presentar una China auténtica al pueblo chileno. Si por mis esfuerzos de trabajo me consideran "poderoso", entonces estoy agradecido por esa descripción. Por ejemplo, en el caso de Tianqi, el gobierno chino fue acusado de tratar de controlar los recursos de Chile y tuve que responder claramente a tales acusaciones sin fundamentos, porque no tenemos ninguna intención ni posibilidad de controlar los recursos de Chile en absoluto.
El vicepresidente de EE.UU. alertó sobre el avance de la inversión china en el mundo, incluyendo a América Latina. ¿Qué opina al respecto?
-Hizo reproches sin fundamento sobre las políticas interiores y exteriores de China. Incluso dijo que interfería en los asuntos internos y las elecciones de EE.UU., lo cual es pura invención y calumnia.
China persevera inalterablemente en el camino de desarrollo pacífico, contribuyendo al desarrollo mundial y defendiendo el orden internacional. ¿Quién suele intervenir en los asuntos internos de otros países? ¿Quién dirige con frecuencia acciones militares a otros países? ¿Quién siempre antepone sus propios intereses a los intereses ajenos? Creo que la comunidad internacional comparte opiniones similares sobre esas cuestiones.
China nunca procurará su desarrollo a costa de los intereses de otros países, mientras que salvaguardaremos con firmeza nuestra soberanía, seguridad e intereses de desarrollo. Y si las cooperaciones entre China y América Latina, incluyendo Chile, han traído beneficios concretos a los países relacionados y sus pueblos, creo que los países y los pueblos latinoamericanos lo saben mejor. Los comentarios irresponsables de otras personas no son necesarios.
Vemos un avance importante de inversión china en sectores claves en la región, por ejemplo en el litio en Chile y Bolivia. ¿No es ese un intento de control?
-Tengo que destacar que la cooperación de China con otros países es totalmente a base del respeto mutuo, la negociación amistosa y la cooperación con ganancias compartidas. Si no fuera en base a esos principios, no serían relaciones de cooperación a largo plazo.
El ingreso de Tianqi a SQM no resultó fácil. ¿Qué evaluación hace?
-Trata de un negocio gigantesco la compra del 24% de las acciones de SQM realizada por la empresa Tianqi con más de US$ 4.000 millones. Cualquier empresa pretende procurar el mayor interés por sí mismo y las estrategias que aplican en las negociaciones también tienen sus propias características. Por lo tanto, no es raro que surgieran algunas vicisitudes durante este proceso. Creo que lo más importante es el resultado.
Tanto el señor Jiang Weiping, presidente de la mesa directiva de la empresa Tianqi, como el señor Julio Ponce, me han presentado las circunstancias sobre la compra.
Tianqi es una empresa privada, a la cual he advertido que respete las reglas internacionales y la legislación de Chile, que hay que conocer bien la cultura empresarial local y las relaciones entre Julio y SQM. Me he reunido en algunas ocasiones con Julio. Tiene experiencias de vida extraordinarias y ha hecho contribuciones importantes e insustituibles a SQM durante su proceso de convertirse en una gran empresa internacionalizada, sobre lo cual Julio merece reconocimiento.Puedo comprender bien sus sentimientos hacia SQM. Estoy convencido de que tras un periodo de ajuste, la cooperación entre Tianqi y Julio en SQM se volverá cada vez más fluida porque ahora están en el mismo barco.
China todavía no es un actor protagónico de las concesiones en Chile. ¿Por qué?
-Eso es verdad y hay varias razones. Las empresas chinas no llevan mucho tiempo entrando en el mercado de Chile, no tienen mucha experiencia, por lo que tienen que conocer más las concesiones, que son una nueva forma de cooperación y constituyen un desafío para ellos.
Además, el gobierno de Chile y algunos departamentos encargados de los proyectos no conocen bien a las empresas chinas, no tienen conocimiento sobre su capacidad, nivel de trabajo y su alto sentido de responsabilidad. Finalmente, el idioma también constituye un obstáculo.
China sí tiene presencia en otros países de la región. ¿El sistema de concesiones de Chile dificulta particularmente su ingreso?
-Es una forma de cooperación que Chile ha tenido por largo tiempo y que le ha servido mucho al desarrollo económico de este país. Lo que las empresas chinas tienen que hacer es conocer en profundidad las concesiones y participar ampliamente para acumular experiencia.
Como lo ha hecho con otras empresas chinas en el país, ¿va a acompañar el proceso de China Railways en su proyecto para la concesión del tren a Valparaíso?
-La participación de las empresas chinas en los proyectos chilenos es asunto propio de las empresas. El cómo se lleve a cabo este proyecto tiene que ser una solución entre el gobierno de Chile y las empresas pertinentes. En cuanto a la construcción de trenes de alta velocidad en general, las empresas de ferrocarriles de China tienen las tecnologías más avanzadas y también las experiencias más abundantes a nivel mundial. Sin duda alguna, en esta área las empresas chinas son una buena opción.
¿Espera la llegada de más bancos chinos al país y una participación más activa de los que están presentes?
-Es posible que haya más bancos que quieren hacer negocios en Chile, dado que es un país que tiene una economía establemente desarrollada y también una política segura. Todas las condiciones de este país son sobresalientes. Pero, por otra parte, entiendo que en Chile las condiciones para recibir a bancos extranjeros no son las más favorables.
¿Por qué?
-Los seis bancos, tales como Santander etc., han ocupado el 90% del mercado de Chile. Para los bancos chinos que acaban de entrar en el mercado de Chile, como sus escalas no son muy grandes, las condiciones competitivas son muy duras y es un gran desafío para ellos.
China abarcó el 30% del comercio de Chile en 2018, ganando ventaja como primer socio comercial de Chile. ¿Actualizado el TLC, espera que 2019 sea un año más intenso?
- El Presidente Piñera concede alta importancia a las cooperaciones pragmáticas entre China y Chile en todas las áreas. El 17 de noviembre de 2018, el Presidente de China Xi Jinping sostuvo una reunión exitosa con el Presidente Piñera en Papúa Nueva Guinea, durante el Foro Apec, y ambas partes hicieron planificaciones para promover las relaciones bilaterales.
El año 2019 las relaciones entre China y Chile se enfrentan a oportunidades históricas. Por primera vez en la historia, los líderes de ambos países tienen la esperanza de realizar visitas recíprocas dentro de un año, lo cual promoverá en gran medida las cooperaciones económicas y comerciales entre los dos países.
El Presidente Sebastián aceptó la invitación del Presidente Xi Jinping para visitar China en abril.
"Acusación de EEUU a Huawei es un intento por defender su hegemonía mundial"
"Paranoia". Para el embajador de China en Chile, Xu Bu, eso es lo que explica las acusaciones de espionaje en contra de Huawei, la firma china a la que el mundo desarrollado le está cerrando sus puertas.
La persecución comenzó en Estados Unidos, cuando el Ejecutivo, Congreso y agencias de inteligencias manifestaron sus preocupaciones, que para el diplomático asiático esconden otras inquietudes: la pérdida de la hegemonía estadounidense, basada en su desarrollo tecnológico.
EEUU y otros países desarrollados acusan a Huawei de llevar a cabo operaciones de espionaje en favor del gobierno de China. ¿Cómo responde a esas acusaciones?
-Estas acusaciones no tienen ningún fundamento. El gobierno de China y Huawei han hecho aclaraciones. Durante los últimos 40 años de la Reforma y Apertura de China, nuestro país ha cosechado éxitos gigantescos en el desarrollo económico y social, también ha hecho importantes contribuciones a la estabilidad y prosperidad de todos los países del mundo y ha recibido grandes elogios de la comunidad internacional.
¿A qué atribuye las acusaciones?
- Algunas personas ven a China con una mirada llena de prejuicios de la mentalidad de la Guerra Fría y el juego de suma cero, y crean una variedad de "teoría de la amenaza de China".
La supuesta "participación de Huawei en el espionaje a favor del gobierno chino", es nada más que otra variante de su "paranoia". China siempre ha exigido a las empresas chinas realizar negocios en el extranjero de conformidad con los principios comerciales y las normas internacionales y con todo respeto a las leyes locales.
Desde otro punto de vista, es muy probable que la acusación de EE.UU. a Huawei justamente demuestra que el gobierno estadounidense suele aprovecharse de sus empresas y productos a favor de sus actividades de espionaje hacia otros países. De otro modo, no puedo comprender por qué EE.UU. dirige este tipo de acusaciones.
¿Este conflicto forma parte de la guerra comercial?
-EEUU está preocupado porque está perdiendo su ventaja tecnológica, por lo tanto estas acusaciones son un intento por abatir los esfuerzos de otras empresas tecnológicas en su proceso de desarrollo.
La acusación de EE.UU. a Huawei es un intento por defender su hegemonía mundial, que se funda, en sus ventajas tecnológicas. Cuando se da cuenta de que otros países tienen un desarrollo tecnológico cada vez más alto, les surgen estas preocupaciones.
Además, esta acusación es parte del conflicto comercial que tienen ambos países. El presidente Donald Trump ha puesto esto sobre la mesa de manera muy clara. Él ha conectado deliberadamente la detención del CFO de Huawei con el conflicto comercial.
¿Cree que se pueda terminar con la guerra comercial en el plazo establecido hasta el 1 de marzo?
-Estoy convencido de que la parte china y la parte estadounidense pueden llegar a una solución a través de negociaciones, porque la guerra comercial finalmente va a dañar sus intereses. Este daño a la economía de EEUU ya ha quedado de manifiesto.
Las economías de EEUU y China están estrechamente relacionadas, su cooperación ha traído importantes beneficios a ambas partes. Las consecuencias de la guerra comercial iniciada por el presidente Trump las va a sufrir la gente común y corriente de EEUU.