Luego que el gobierno chino no entregara señales sobre el fin de su estricto protocolo Covid Cero y pese a las consecuencias que ello está trayendo a la economía y a la población, el embajador del país en Chile, Niu Qingbao, enfatizó que las medidas no tratan de cerrar al gigante asiático al mundo en aspectos fuera de lo sanitario, sino todo lo contrario.
En un webinar organizado por la Fundación Chilena del Pacífico, el representante descartó que China esté avanzando a una visión netamente interna de su desarrollo. “Recalcamos una relación positiva entre ambos flujos, nacionales e internacionales”, señaló.
En este sentido, indicó que la resiliencia con la que China está enfrentando la implementación de sus medidas de confinamiento total y parcial que han frenado el crecimiento “va a proporcionar grandes oportunidades a otros países”. Esto, ya que justificó que en paralelo se está trabajando en la apertura internacional con respecto a lo interno.
Sobre esta línea, el embajador llamó a confiar en que actualmente China lidera como país en comercio exterior, atracción de inversión directa extranjera e inversión en ultramar. Por lo mismo, no darán un paso “a una visión solamente concentrada en lo interno”.
“Realmente fomento a la comunidad chilena a utilizar por completo las oportunidades que han sido creadas por el mercado interno de China, las inversiones continuas, las alianzas tecnológicas, la integración financiera y la corporación de gobernanza estratégica”, planteó Qingbao.
Pese a las cifras de retroceso que experimentó el gigante asiático en los dos primeros trimestres del año, el embajador afirmó que las tasas de crecimiento debiesen estabilizarse para los períodos venideros. Aun así, aseguró que “estamos en una nueva era, en que es más valorado un crecimiento de calidad más que una expansión rápida”.
Según planteó Niu Qingbao, pese a la crisis inmobiliaria, indicadores como el empleo y el de la inflación se han mantenido estables. “En muchos países lo inmobiliario es un impulsor del crecimiento, pero también un problema potencial, y China en este sentido no es excepción. El gobierno chino está muy consciente de los riesgos potenciales de un crecimiento sin control del sector inmobiliario, entonces hemos formulado políticas para regularlo, y lo que se dice frecuentemente es que las casas son para vivirlas y no para especular (…) Contribuiremos a un crecimiento, pero tenemos que seguir en control”, dijo.
Sistema de gobernanza global
En cuanto a los lineamientos que indicó el Partido Comunista de China respecto a la política exterior, el embajador en Chile sostuvo que están comprometidos con un “futuro compartido para construir un nuevo modelo de relaciones basado en cero conflictos y una cooperación que sea sumamente beneficiosa”.
Consultado por la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) –proyecto de Xi Jingping para el libre comercio–, el representante señaló que esto “no significa comenzar de cero ni establecer un sistema paralelo. Las instituciones multilaterales creadas por iniciativa China son complementos y no sustitutos de lo existentes, están abiertas a participación de todos los países”.
Mirando hacia cómo esto podría afectar a América Latina, el embajador enfatizó en que “China no es ni será una superpotencia. Una superpotencia es cuando se impone su voluntad al mundo, y China no tiene intención de hacer eso. Las personas de Latinoamérica necesitan y aspiran a equidad, justicia y cooperación beneficiosa mutua, no a políticas de poder. Los países son socios integrales del desarrollo futuro”.
“China propone que ambos lados unan sus manos contribuyendo al bienestar de los pueblos de América Latina y de China, logrando un progreso de las relaciones. La cooperación China y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) es una opción independiente y voluntaria de ambas partes, nuestra alianza no apunta a nadie, y por supuesto, no debería ser intervenida por terceros”, expuso Niu Qingbao.
Relación con Chile
Debido al interés chino en la sustentabilidad, el embajador indicó que China y Chile tienen “visiones e intereses comunes sobre la gobernanza global, incluyendo el cambio climático. Hemos destinado muchos recursos a estas áreas, por lo tanto, firmemente estímulo más alianzas en proyectos específicos que puedan ayudar a prevenir el desarrollo sostenible”.
Señalando como ejemplo la cooperación que existe en el campo de la electromovilidad, ya que Chile provee el litio y China es el mayor fabricante de vehículos eléctricos en el mundo, Qingbao llamó a seguir esta senda. “Estas alianzas no solo benefician al sector minero de Chile y a la comunidad local, sino también ayuda ecológicamente al medioambiente. Debemos ampliar el desarrollo en esta área y extender las cadenas de producción mineras colocando más valor agregado, en vez de solo exportar”, aseguró.
También, el embajador felicitó a Chile por la “decisión inteligente” de haber firmado el 2021 para ser parte del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII). Según recalcó, se ha logrado la mayor tasa de crédito, “además de integrarse al círculo económico y ser un portal entre Latinoamérica y Asia”.