Abril de 2020. Chile saliendo de una crisis (social) y entrando a otra crisis (sanitaria). Millones de personas preocupadas por sus puestos de trabajo y el contagio. Así y todo, el 3 de abril, José Tomás Fernández y Ariel Vaisman lanzaron Rendalo Maq. Se trata de una red de arriendo de maquinaria online. Algo como el Google para buscar y rentar este tipo de productos, en base a un algoritmo se conecta con los proveedores de este rubro. “Ha sido un desafío, porque a diferencia de otros emprendimientos como los de e-commerce, la industria de arriendo de equipos y maquinaria se ha visto fuertemente afectada”, cuenta Vaisman. Han logrado 45% de crecimiento promedio mensual en cantidad de arriendos y esperan cerrar este año con US$200.000 de facturación y llegar a US$3 millones el 2021.
Pero unos meses antes, cuando ya llegaban noticias del coronavirus desde China y luego de 15 años de experiencia en las comunicaciones del vino, Vladimir Véliz creó WineApp. Esta startup se define como una plataforma para evaluación sensorial de vinos. Si bien aún están en marcha blanca, proyectan ventas por US$3 millones al tercer año. Según Véliz, la pandemia presenta “un gran desafío tecnológico e histórico, ya que la industria del vino veía a internet como un medio más y hoy está conscientes de la importancia que significa poder estar cerca del consumidor”.
Y llegamos a marzo. Javier Pérez lanza Numera.me con el Covid ya en nuestras narices. Se trata de una aplicación web en la que los usuarios pueden solicitar turnos directamente online desde su casa. La app muestra cuántas personas hay en espera y envía notificaciones cuando el consumidor esté cerca de ser atendido. Esperan cerrar el 2020 con US$150.000 en facturación, aunque, reconoce Pérez, “no ha sido un año fácil”.
Buscando nichos
Los emprendedores ven la oportunidad en el momento justo. Por ejemplo, tomando en cuenta el fuerte estrés de la población bajo la “nueva normalidad”, en marzo entró en operación Terapi.cl. Estaba el caldo de cultivo perfecto para una plataforma online de terapia psicológica profesional “a un costo mucho menor que la terapia tradicional”, asegura Simón Michell, su cofundador.
Un algoritmo de inteligencia artificial es capaz de encontrar los mejores terapeutas para cada paciente en base a sus necesidades. Las consultas han crecido 500% desde abril y en base a sus proyecciones esperan terminar el año realizando más de 3.000.
La vida a distancia también aumentó otra práctica: el uso de servicios online. Y es en esta cancha donde juega Cardda, startup surgida hace solo dos meses que permite a las empresas contratar servicios como Amazon Web Services (AWS) o Google Adwords, como si lo hicieran con cualquier otro proveedor nacional.
Cristóbal Grinbergs, su CEO, lo explica: “El problema al contratar estos servicios internacionales es que necesitas una tarjeta de crédito, lo que resulta engorroso para muchas empresas que están acostumbradas a trabajar con factura y pago a 30 días”. Ya están facturando cerca de $20 millones al mes y esperan finalizar el 2020 con $300 millones.
Cristóbal Griffero también armó una startup para simplificar servicios, en este caso, financieros. El resultado: Fintoc. Se trata de una “API bancaria” que permite que la información fluya de manera digital entre el banco de los clientes y otra aplicación. “Nacimos durante la pandemia. No conocemos la vida normal como empresa. De hecho, con Lukas Zorich (su socio) nos hemos visto solo una vez en persona, y fue el día que nos conocimos. Esa misma semana partimos trabajando en Fintoc”, dice Cristóbal. El 2021 quieren aterrizar en México y/o Brasil.
Wabi, una app dedicada a ayudar a familias que tienen almacenes; Foodstock, una plataforma web que automatiza las tareas manuales de los restaurantes; Milla travel, un software de enfocado a los viajes corporativos; y la plataforma de educación ambiental EcoHéroes, son algunas de las tantas startups que también han sido dadas a luz en la primera mitad de este histórico 2020.
Seguramente más emprendedores buscarán navegar y crear su negocio en aguas turbulentas. Y es ahí donde surge Caladoo. Uno de sus creadores, el ex timonel de Mapcity, Roberto Camhi, lo explica: “El proyecto fue concebido en tiempos de pandemia, como una forma de ayudar a los miles de emprendedores que han tenido que dedicarse a la venta online como forma de subsistencia, muchas veces de productos fabricados por ellos mismos. Es un marketplace para emprendedores y pymes”.