La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) empieza a dejar atrás el complejo año 2020 y reportó utilidades por US$ 39,6 millones en el primer trimestre del año. Este resultado se compara favorablemente con las pérdidas por US$ 34,2 millones registradas en el mismo lapso del año pasado.
La estatal precisó que tuvo un EBITDA de US$ 184,7 millones a marzo, cifra “muy superior” a los US$ 76,4 millones registrados en el primer trimestre del 2020.
De acuerdo a su balance, se logró una reducción de los costos financieros de un 6,3%, disminuyendo el endeudamiento en US$ 700 millones desde el peak alcanzado el 2018.
Andrés Roccatagliata, Gerente General de ENAP, explicó que las cifras “son producto del plan de eficiencia, productividad, ahorro y control de inversiones elaborado por el Directorio y la actual administración y puesto en marcha desde finales del 2018″. Una estrategia que, sumado a la incorporación de tecnología digital, le habría significado a la empresa “duplicar sus necesidades de capital de trabajo e incrementar los costos de la refinería”.
Sin embargo, en ENAP miran el segundo semestre de este año con cautela, y esperan que “la racha alcista que ha experimentado el crudo se detenga o aplane su nivel de crecimiento”. “Pese a esto, no hemos perdido el foco, en la ejecución de nuestro plan estratégico (...) y la transformación de la compañía desde el punto de vista financiero y digital”, dijo Roccatagliata.