Del quinto al cuarto lugar en el ranking de las exportaciones mineras chilenas saltó el carbonato de litio el año pasado, de acuerdo con cifras publicadas por la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), en su último anuario estadístico.
Esto, luego que los envíos de litio aumentaran 47% entre 2016 y 2017, pasando de US$465 millones a US$684,2 millones.
En 2017, el cobre se mantuvo como el principal producto de exportación minero, con US$33.851 millones, que representa el 89% del total. Más atrás se ubicaron el molibdeno, con US$1.225 millones; el hierro, con US$1.005 millones, y luego el litio. En 2016, en cambio, el litio fue superado por el oro, que bajó de envíos por US$840 millones a US$673 millones.
El documento, además, reveló otros interesantes datos de la industria minera, relativos por ejemplo al consumo de agua y de energía.
En el caso del recurso hídrico, se indicó que la cantidad de agua utilizada por la minería del cobre en 2017 alcanzó los 13,26 m3/seg, un 2,6% menor que el año anterior. El consumo es liderado por la Región de Antofagasta, zona que produce más del 50% del cobre en Chile.
Según explicó el vicepresidente ejecutivo de Cochilco, Sergio Hernández, el agua de mar en la minería del cobre alcanzó los 3,16 m3/seg, que representa el 19% del agua utilizada en minería. De ellos, 1,63 m3/seg corresponden a agua de mar utilizada directamente en los procesos, con un alto contenido de sal, mientras que 1,53 m3/seg es de agua previamente desalinizada.
"El consumo de agua de mar presentó un aumento considerable durante el 2017 de 84% respecto al año anterior, principalmente por las operaciones de Sierra Gorda y Escondida. En otras palabras, es destacable que el consumo de aguas continentales disminuye y aumenta el de agua de mar, dando cuenta de la responsabilidad con que las mineras enfrentan la restricción hídrica", indicó Hernández.
En el caso de la energía, Cochilco informó que el consumo energético total en la minería del cobre aumentó de 168.487 terajoules (TJ) en 2016 a 169.923 TJ en 2017, reflejando un alza interanual de 0,85%.
"Esta alza estuvo impulsada por un mayor consumo de combustibles, que pasaron de 80.234 TJ a 81.857 (+2,0%), incremento que se explica principalmente por cambios estructurales en distintas fases del proceso de explotación", complementó Hernández.