Los cuestionamientos al avance legislativo del proyecto de Ley que faculta el retiro del 10% de los fondos previsionales para enfrentar situaciones extraordinarias, están muy lejos de terminar.
En el marco de toda esta discusión que se ha vuelto a levantar, y en conversación con Pulso TV el exasesor del Ministerio de Hacienda, y e investigador de Clapes UC, Hermann González, manifestó sentirse preocupado por el hecho de que en este debate legislativo no se considerase la opinión de los técnicos respecto al potencial impacto que el retiro de los fondos pudiera tener.
“No hablo solo de los técnicos del gobierno, sino de los técnicos de oposición, los que dijeron que este era un mal proyecto de ley, con efectos de largo plazo muy significativos”, dijo González.
En ese sentido, enfatizo que el obviar la visión técnica del debate afecta considerablemente “la visión que hacia afuera tenemos como país; y es malo para el desarrollo de Chile. Eso me preocupa” remarcó.
No obstante a eso, y pese a que cree que el resultado final de este proyecto no será muy diferente a como se plantea hoy día, Hermann se muestra esperanzado porque en la Cámara Alta se frene esta iniciativa.
Por eso, dijo que la alternativa que plantea el gobierno para la clase media a través de estos créditos con cargo al fisco y con un componente de subsidio, es mejor. Esto, a su juicio no pone en juego la vejez de quienes retiren sus fondos ni altera la rentabilidad de los mismos para quienes estén próximos a jubilarse.
Reactivación económica
¿Se puede dar por sentado que habrá un repunte vigoroso el año próximo? Esa es precisamente una interrogante que abordó el exasesor de Hacienda, quien no tiene tan claro que esto pueda suceder, al menos no con la intensidad que estima el Central y el ministro Briones.
“Sabemos que hay mucha incertidumbre y estamos frente a una enfermedad que no conocemos y que ha tenido evoluciones muy diversas”, dijo.
Por eso, y aunque reconoce que la propagación de la enfermedad ha cedido respecto a como se estaba presentando en semanas previas y, que se pudiera inferir que habrá algún signo de recuperación en el cuarto trimestre, “eso estaría por verse”.
En todo caso, cree que esta recuperación tiene que separarse en dos etapas, una en donde se van produciendo de a poco la puesta en marcha otra vez de la economía, y una de más mediano y largo plazo.
A juicio de González, esta última, está altamente condicionada con “los riesgos de la violencia, incertidumbre constitucional, y el ambiente político interno que no es positivo. Esa es una preocupación para el mediano y largo plazo que tiendo a compartir”, sostuvo, a lo que seguidamente agregó que no ve “una recuperación de la capacidad de crecimiento de la economía”.