La inflación sorprendió al alza durante el primer trimestre. Si bien se esperaba que los registros fueran elevados debido al contexto internacional de mayores precios y por el factor interno de la mayor liquidez que presionó la demanda, el registro de marzo de 9,4% en doce meses y un avance acumulado de 3,4% en el año, no estaba en los cálculos de ningún analista y tampoco del Banco Central.
Ello modificó las perspectivas para 2022 y hoy todo indica que la inflación terminará a diciembre muy por sobre el 5,6% que proyectó el ente rector en el Informe de Política Monetaria de marzo y que el 10% anual se superaría antes de lo que el Banco Central tenía previsto, posiblemente tan pronto como en abril. De ser así, se trataría de su mayor nivel desde septiembre de 1994 -hace 27 años y medio-, cuando la inflación en 12 meses fue de 10,4%.
Esa es la expectativa que tienen los economistas, quienes en su mayoría esperan que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del cuarto mes del año, que dará a conocer este viernes el INE, se ubique de 1% hacia arriba -aunque igual hay algunos con pronósticos algo más moderados-, con lo cual la variación anual sobrepasaría el 10%.
En la parte alta de las proyecciones se ubica Fernando Suárez, Senior Portfolio Manager de Fintual, quien espera un alza del IPC de 1,2%. Su estimación “se basa en el fuerte incremento que ha tenido el tipo de cambio, sumado a una persistencia en las presiones de demanda a nivel local, las cuales se reflejaron en el último dato de crecimiento conocido esta semana”. En ese caso, la inflación anual escalaría a 10,3%.
Un poco más abajo está Martina Ogaz, economista de Euroamerica, quien proyecta una variación mensual de 1,1%. Explica que su pronóstico subió de 0,8% hasta su nivel actual en el transcurso del mes, “ante alzas en el transporte aéreo y alimentos que registraron nuestras encuestas”. Con ello, el IPC en 12 meses llegaría a 10,2%.
Samuel Carrasco, economista senior de Credicorp Capital, también prevé un incremento de 1,1%, debido en mayor medida a un aumento en los precios de alimentos, transporte y salud. “Estimamos que el peak inflacionario ocurrirá en junio, con una inflación anual cercana al 11%”, advierte.
Rodrigo Montero, decano de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma, puntualiza que el IPC estará en torno a 1%, y por ello “es muy probable que en abril se llegue a los dos dígitos, es decir, un poco antes de lo que anticipaba el Banco Central”. Para el académico, “las presiones inflacionarias se han mantenido fuertes, y en el balance de riesgos de la autoridad monetaria estaba el conflicto entre Rusia y Ucrania. Ese conflicto ha seguido alimentando las presiones inflacionarias”. Con un IPC de 1%, la variación anual sería de 10,1%.
En la parte baja de las previsiones se ubica el economista jefe de Bice Inversiones, Marco Correa, quien anticipa una variación mensual en el rango de 0,8% a 0,9% para el IPC de abril. Mientras que Tomás Flores, economista de Libertad y Desarrollo, tiene como escenario base un IPC de 0,9%. Con ello, la inflación anual se elevaría a 9,9% o 10%.
En general los economistas coinciden en que las divisiones que tendrían una mayor incidencia positiva serían las de Alimentos, Transporte y Salud. En ese contexto se mantendrá el impacto del alza de productos como el trigo y los combustibles, además del traspaso de mayores costos por indexación, como en el caso de salud, similar a lo que sucedió con la división de Educación en marzo.
Con este nuevo escenario que se está configurando, el mercado ya tiene incorporado que a diciembre el IPC se ubicará entre 8% y 8,5% e incluso algunos analistas no descartan un cierre del año en niveles cercanos a 9%.
Otra fuerte alza de la tasa de interés
Dado este panorama inflacionario, los economistas esperan que el Banco Central suba la Tasa de Política Monetaria (TPM) entre 0,75 y 100 puntos base en la reunión de este jueves, situándola entre 7,75% y 8%.
“En la Reunión de Política Monetaria de este jueves proyectamos que el consejo del Banco Central elevará la tasa en 100 puntos base, esto luego de la sorpresa inflacionaria de marzo y la sorpresa positiva que dejó el crecimiento de marzo”, explica Ogaz.
Esa misma visión entrega Carrasco, quien prevé un aumento en la tasa de interés de 100 puntos base, “en medio de presiones de precios que se mantienen elevadas, desanclaje de expectativas inflacionarias, depreciación del peso y un contexto internacional complejo”.
Y Montero subraya que “el escenario más probable es que el Banco Central se va a mover más rápido de lo esperado hacia el techo del corredor para la TPM. Por ello, anticipo un alza de 100 puntos base para mañana”.
Flores y Suárez tienen un pronóstico un poco más cauto y esperan que el alza en la tasa de interés sea de 0,75%.