Con relativo optimismo recibieron los expertos tributarios los cambios que presentó Hacienda. Por un lado, valoran una serie de medidas como las que apuntan a apuntalar la inversión, la gradualidad para el alza de impuesto para las pymes, las modificaciones al impuesto al patrimonio y el diferimiento en el impuesto a las utilidades retenidas, también hay reparos en relación al impuesto al patrimonio y nuevas medidas pro inversión considerando el escenario de recesión que se avencina en 2023.
En lo primero, José María Diez, socio de Recabarren & Abogados, sostiene que “se suavizan los términos generales de la reforma tributaria, pero como siempre, el diablo está en los detalles, por lo que necesitaríamos ver las indicaciones para hablar con más propiedad”. Sin embargo, de lo positivo rescata “la eliminación del impuesto de salida para los altos patrimonios, la baja de la base imponible del impuesto al diferimiento, se repone el uso del crédito indirecto a los impuestos pagados en el exterior y la gradualidad en los cambios”.
Valentina Walker, de Palma Abogados resalta “la mantención al tratamiento tributario actual del leasing o la gradualidad para el régimen pyme”. Eduardo Correa Mendoza, socio de Guerrero & Cía, valora la prórroga parcial del beneficio de la depreciación (semi instantánea), la mantención gradual de los beneficios de impuesto a la renta aplicables al Régimen Pyme y la modificación planteada respecto al tratamiento del Leasing son positivas”.
Javier Jaque, socio consultoría tributaria CCL tax, pone el acento en las medidas pro inversión, puesto que “van en la dirección correcta, dadas las proyecciones de crecimiento para Chile. Las medidas pro inversión son buenas dada la situación que se avecina el próximo año”.
Claudio Bustos, socio de Bustos Tax & Legal rescata “la norma de depreciación semi-instantánea para activos fijos adquiridos en el año 2023, la postergación de la entrada en vigencia de la norma que limita el aprovechamiento de las pérdidas tributarias a un 50%, y la eliminación del cambio de tratamiento tributario para los contratos de leasing”.
Andrés Martínez, socio Líder Consultoría Tributaria de KPMG Chile, acota que “hay cosas interesantes de los anuncios entregados por el Ministerio de Hacienda, y se nota que de a poco se han ido recogiendo ciertos puntos técnicos donde había claras falencias”.
Juan Pablo Cabello, socio de Cabello Abogados,dice que es “relevante la modificación del impuesto de 1,8% sobre las utilidades retenidas en sociedades de rentas pasivas, por un 2,5% sobre el impuesto mismo pendiente, lo cual lo hace más razonable”.
Entre lo que todavía falta, Correa sostiene que “el tratamiento a las perdidas y el impuesto al patrimonio, son aspectos que debiesen revisarse en profundidad para ver si es viable que con ello se logre incentivar el emprendimiento y la repatriación de capitales”.
Para Walker, “el impuesto al patrimonio, la limitación al uso de las pérdidas, el impuesto a las utilidades retenidas, entre otros, son algunas de las que deberían revisarse”. Y Bustos asevera que “la mayoría de las medidas son temporales, lo cual da a entender que la autoridad aún no entiende que lo que necesitamos son normas permanentes que incentiven la inversión. El estímulo a la inversión desde el punto de vista tributario debiera ser parte de la política fiscal permanente de Chile”.