El comercio exterior será un factor que sumará al crecimiento de la actividad este año. Eso es lo que espera el Banco Central, con una proyección de incremento de 4,5% para las exportaciones en 2024. Un sector relevante de los envíos no cobre es el salmón, el que en el primer trimestre tuvo un arranque auspicioso en volumen, pero no en ingresos.
De acuerdo al balance trimestral que hace el Consejo del Salmón, las toneladas exportadas de salmón y trucha durante el primer trimestre de 2024 totalizaron 224.752, lo que se tradujo en un alza de 10%, siendo la cifra más alta desde el año 2021.
Según detalló, este aumento se explica principalmente por el incremento de 29,4% en las toneladas exportadas de salmón coho (19.365), lo que se suma a la fuerte tendencia de crecimiento que ya traían los envíos de esta especie hasta 2023. En cambio, de acuerdo al reporte, el salmón atlántico y la trucha crecieron solo un 1,1% (1.403) y 8,2% (586) en el periodo analizado, respectivamente.
Otra de las razones que puede estar detrás de la importante alza de toneladas exportadas durante el trimestre, es la mayor cantidad de salmón en formato entero y HG (descabezado) enviado, el que se elevó en 16,5% en un año, principalmente en la especie coho, con un incremento de 31,6%.
Pero a pesar de este mayor volumen, los envíos de salmón en el primer trimestre US$ 1.749 millones, lo que se traduce en una disminución de 0,9% en un año. “Esta caída se explica, principalmente, por una baja de los precios generales en el periodo analizado, estimándose en un 10,4% anual”, puntualizó el informe.
En el desglose, el Consejo Salmón indicó que la mayor caída del valor en dólares se produjo en el salmón coho (-16,6%), mientras que el salmón atlántico tuvo una leve baja en el periodo, de 0,4%. “Lo anterior tiene que ver con el aumento de la exportación de salmón con menor valor agregado (pieza entera) y, por ende, un menor precio, en mayor proporción que aquel con mayor nivel de proceso (filete o trozo)”, sostuvo el análisis.
Loreto Seguel, directora ejecutiva del Consejo del Salmón, afirmó que “desde el peak de 2022, los precios del salmón a nivel internacional han ido en descenso, lo que ha repercutido negativamente, perdiendo competitividad la salmonicultura chilena”. En ese contexto, apuntó que “durante 2023, los precios descendieron, entre otros factores, debido a un incremento de la oferta internacional mayor al aumento de la demanda”.
Por ello, enfatizó que “la dinámica de los precios este año dependerá de la expansión de la oferta durante este periodo, capacidad que ha sido limitada durante los últimos años, en particular en Chile: si en la década 2003-2013 la producción de salmones crecía a un ritmo del 6,3% promedio anual, durante la década 2013-2023 esta cifra llegó al 3,9%. Es decir, hablamos de una industria estancada que en 20 años disminuyó a la mitad su velocidad de crecimiento”.
En cuanto a los productos no cobre, el salmón se ubicó en la segunda posición como más exportado, detrás de las cerezas.
Desde el gremio afirmaron que “debido a la fuerte estacionalidad del cultivo de cerezas - las que sumaron el 18% de las exportaciones no mineras en el periodo (US$ 2.003 millones)-, cuya cosecha y venta se concentra en los primeros meses del año, el salmón y trucha fue la segunda exportación no minera más importante del país durante este periodo, llegando al 15,7%”.
Detrás del salmón, los productos más relevantes fueron celulosa (US$802 millones), servicios (US$675 millones), y madera y sus manufacturas (US$552 millones).
Según el informe, durante el primer trimestre de 2024, en términos de toneladas exportadas, los principales compradores de salmón chileno fueron Estados Unidos (26,8%), Japón (26%), Brasil (17,1%), Rusia (3,9%) y China (3,7%).P