Preocupación está causando en los sindicatos de las empresas ligadas al Transantiago, la demora -como ellos mismos la califican- de la Dirección del Trabajo por resolver la calificación de los servicios mínimos, en caso de huelga, de la Reforma Laboral.

A principios de febrero de este año, las empresas Alsacia, Express, Vule y SuBus ingresaron a la Inspección del Trabajo la calificación de servicios mínimos en caso que sus trabajadores paralicen sus funciones, producto de una infructuosa negociación colectiva. Las empresas pidieron servicios mínimos entre el 90% y 95% de la dotación, sin embargo, la Inspección del Trabajo sólo otorgó un 13,6% de dotación, pero sólo en caso de contingencia y por tres horas como límite.

Esto llevó a las firmas a apelar en la Dirección Nacional del Trabajo (DT), para insistir en un porcentaje mayor de servicios.

La razón esgrimida por las operadores del Transantiago -que tienen procesos de negociación colectiva en distintas fechas- apunta a que ellas se consideran firmas de utilidad pública, por lo que a su juicio, no podrían detener su funcionamiento, ya que este debe estar garantizado para la población de la Región Metropolitana, pues de lo contrario, y de generarse huelgas al interior de éstas, existiría un colapso en el resto de los servicios de transporte público de la capital.

La presentación y determinación de los servicios mínimos es fundamental para poder iniciar las negociaciones colectivas. Tanto Express como Vule y SuBus deberían iniciar la negociación durante este mes o principios de julio, sin embrago, como hasta ahora la DT no ha entregado la resolución, tras la apelación de las empresas del Transantiago, éstas se encuentran paralizadas.

El presidente de la Confederación Nacional Unitaria de los trabajadores del Transporte y afines de Chile, Ricardo Maldonado señaló que "lo que nosotros conocemos de los sindicatos que están en este proceso SuBus, Express y Alsacia tienen procesos paralizados (negociaciones colectivas) mientras no salga la resolución de la DT. Una vez determinados los servicios mínimos se podrá dar inicio a las negociaciones colectivas".

En el caso de Vule, si bien los notificaron los servicios mínimos, aseguran que hubo un sindicato que no fue informado, por lo que se tuvo que hacer el proceso nuevamente.

Vule además tiene presentada una solicitud ante el Poder Judicial para que sean consideradas dentro de las "empresas estratégicas", entidades que quedan excluidas de la posibilidad de huelga de sus trabajadores, por considerarse su producción de funcionamiento vital.

En cuanto a Alsacia, ésta adelantaría su negociación para agosto o septiembre, ya que el contrato como operadores del Transantiago finaliza en octubre de este año.

¿razón de la Demora? Para Maldonado acá se presenta otro problema, ya que si las empresas no están de acuerdo con la resolución de la Dirección del Trabajo, estos casos se judicializarán y puede suspender las negociaciones por un tiempo más prolongado.

"En definitiva, si el empleador judicializa el proceso de calificación de servicios mínimos, van a haber conflictos serios por las condiciones de trabajo en los buses, y por eso es importante no retrasar las negociaciones colectivas, porque es el medio para mejorar la calidad del trabajo", aseveró Maldonado.

Además el presidente de la Confederación puso en duda el "atraso" de la DT en este caso, asegurando que "a nosotros nos extraña mucho la demora desde la Dirección del Trabajo para resolver esto (...). Si la DT se va a demorar para resolver esto, 3, 4 o 6 meses, dejando abierto y en tierra de nadie".

Hay que recordar que el Ministerio del Trabajo ya a anunciado que va a hacer modificaciones a la reforma laboral, y entre sus puntos se encuentran los servicios mínimos, a lo que suma los grupos negociadores y los procedimientos de la huelga.