Luego de que el propietario de la constructora CIAL, Alejandro Becker, confirmara hace unas semanas el quiebre de la empresa por problemas de financiamiento y tras una denuncia interpuesta por el fiscal regional del Ministerio de Obras Públicas (MOP), Cristian Ríos, la Fiscalía Regional de La Araucanía abrió una investigación por eventuales irregularidades .
Según informa hoy el medio El Austral de Temuco, el pasado 29 de junio se ingresó la denuncia que se basa en tres hechos respecto al proceso del cierre de la compañía. El primero se refiere a facturas irregularmente recibidas por inspectores fiscales y que la empresa habría vendido a empresas de factoring externas y bancos particulares, según Ríos estas ascenderían a un monto de $3.500 millones. A esto se suma que habría otras facturas cedidas co notas de créditos por $2.500 millones y documentos por $2.000 millones emitidas irregularmente que habrían sido cedidas a compañías de factoring pero que no habrían sido cobradas. Todo esto, según el fiscal del MOP, se traduciría en más de $8.000 millones de dineros cobrados con facturas fraudulentas.
La investigación que realizará la Fiscalía regional indagará en las acusaciones y estará a cargo, según informa el medio de Temuco, del fiscal jefe de la Fiscalía de Alta Complejidad, Héctor Leiva.
"Hay hechos que pueden ser constitutivos de delitos (...) En principio, lo que parece mostrar la denuncia son eventuales fraudes al fisco y también hay que analizar si hay delitos dentro del proceso de liquidación y de reorganización de la empresa que tienden a provocar fraude en los acreedores. Es lo que antiguamente era la quiebra fraudulenta", dijo hoy el fiscal Héctor Leiva.