Fitch Ratings se refirió este miércoles a la estrategia nacional del litio y los eventuales efectos en actores como SQM, Albermale y Codelco. La clasificadora de riesgo estima que el plan del gobierno de crear asociaciones público-privadas será de “neutral” a “positivo” para los perfiles crediticios de dichas compañías.
Fitch, además, dijo que la estrategia del litio no proporcionará el impulso previsto a la industria, “dado que es poco probable que las empresas privadas inviertan un capital significativo para desarrollar proyectos de litio a través de consorcios controlados por el Estado”.
La calificadora de riesgo definió la estrategia del gobierno como una reorganización material e integral del acuerdo público-privado existente sobre la producción de litio, pero no una nacionalización, “ya que el litio está reservado al Estado desde que el mineral fue declarado no concesible en 1979. Esta nueva estrategia debe ser aprobada por el Congreso y probablemente sufrirá varios cambios antes de convertirse en ley”.
Además, Fitch recordó que el gobierno tiene actualmente acuerdos con SQM y Albermale mediante contratos de arrendamiento que les permiten extraer y producir litio químico del Salar de Atacama y que los contratos definen una cantidad máxima de mineral a extraer hasta su vencimiento. El contrato de SQM vence en 2030, mientras que el de Albemarle vence en 2043.
De acuerdo con Fitch, los contratos de arrendamiento han sido favorablemente rentables para el Estado, dados los precios excepcionalmente altos del litio en los últimos tiempos, sin que se haya requerido ningún gasto de inversión ni se haya asumido ningún riesgo operativo. “SQM aportó US$5.000 millones al Fisco, impuestos incluidos, en 2022, cuando el precio spot del carbonato de litio era de US$71.200 por tonelada, a pesar de los contratos de venta a largo plazo de SQM a precios inferiores al spot. Este monto representa 1,3 veces la utilidad neta de SQM y fue el doble de lo aportado por Codelco”, dijo la calificadora.
Con todo, Fitch destacó que SQM posee una “sólida posición negociadora”, en parte debido a que ya está produciendo material de buena calidad y que “Chile está ansioso por acelerar su estrategia del litio para capitalizar las extraordinarias condiciones del mercado del litio antes de que se cierre la ventana de oportunidad”. Además, la clasificadora dijo que los precios podrían verse presionados por la nueva oferta mundial que está programada para entrar a partir de varios proyectos en curso, además del trabajo en desarrollo para encontrar sustitutos de litio y aumentar la actividad de reciclaje.
“Creemos que SQM se vería positivamente impactada por la estrategia nacional del litio que adelantó las discusiones para un nuevo acuerdo debido a su fuerte posición negociadora. Aunque los contornos de cualquier acuerdo no están definidos, esperamos que el hecho de que la empresa asegure la producción de litio a un costo muy competitivo más allá de 2030, probablemente compensará las consideraciones negativas relacionadas con una mayor participación pública en las actuales operaciones de SQM en Chile Lithium. A la inversa, en un resultado negativo de la negociación, SQM podría seguir explotando el salar hasta 2030, pero con una mayor visibilidad futura que permitiría a la empresa ajustar su estrategia para enfrentar lo que vendrá a fines de la década”, sostuvo.
Sobre Albermale, en tanto, Fitch dijo que es probable que el impacto a corto y medio plazo de la estrategia nacional del litio sobre dicha empresa sea limitado. “Los derechos de producción de Albemarle expiran 13 años después del contrato de SQM. La diversificación de las operaciones de Albemarle debería proporcionar cierta flexibilidad estratégica adicional en sus futuras conversaciones con Codelco. Chile representa aproximadamente el 30% de la producción total de la empresa en el año fiscal 2022″, dijo.
Finalmente, sobre Codelco, Fitch aseveró que, según el nuevo plan del gobierno, podría gestionar las mayores reservas de litio del mundo y agregó que “la mejora de la diversificación es positiva desde el punto de vista crediticio, y la medida seguirá aumentando la importancia de la empresa para el gobierno. Creemos que cualquier beneficio derivado del control del suministro de litio de Chile recaerá probablemente en el Estado, dadas las crecientes demandas sociales de Chile y teniendo en cuenta un historial de 50 años en los que el Estado ha extraído casi todo de Codelco”.