El Fondo Monetario Internacional (FMI) celebró este viernes la aprobación del Congreso de Argentina de la “Ley Bases” con la que el Gobierno de Javier Milei pretende realizar un saneamiento de la economía y facilitar nuevas inversiones.
“Damos la bienvenida a la aprobación por parte del Congreso de una legislación fiscal y estructural clave, así como de medidas para fortalecer el marco de política monetaria”, dijo la vocera del FMI, Julie Kozack mediante su cuenta de X (ex Twitter).
La ley, añadió, tiene el objetivo de “mejorar la calidad de la consolidación fiscal, reducir aún más la inflación y apoyar la recuperación económica”.
El Ejecutivo de Milei se anotó una victoria política en la madrugada de este viernes con la aprobación, tras seis meses de arduo trámite parlamentario, de un ambicioso paquete de reformas económicas.
La “Ley Bases” constituye, junto con el plan de shock fiscal, el corazón del programa de Gobierno de Milei. La norma declara la emergencia pública en materia administrativa, económica, financiera y energética por el plazo de un año, dándole al Ejecutivo facultades delegadas en esas materias.
Kozack afirmó que el FMI, con quien Argentina tiene un programa de refinanciamiento de deuda, seguirá “colaborando constructivamente” con el equipo económico de Milei “en políticas para crear una Argentina más próspera y estable”.
Conflicto con exministro Valdés
Las declaraciones de la vocera del FMI se dan en medio de la controversia generada luego que medios argentinos publicaran el Presidente de Argentina, Javier Milei, había pedido a las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI) sacar al exministro de Hacienda chileno, Rodrigo Valdés, de la negociaciones que lleva adelante el organismo multilateral con la país trasandino.
El ministro de Economía, Luis Caputo, habría transmitido el miércoles, en reunión de gabinete, la intención de separar de las conversaciones al actual director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, según consignaron fuentes al diario La Nación de Argentina.
“Para el FMI no fue una sorpresa que Javier (Milei) criticara a Valdés, esto ya había sido hablado antes con las autoridades del Fondo”, aseguró una alta figura del gabinete del libertario, añadió el mismo medio, el que detalló una conversación que habría tenido el propio Milei con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en la cumbre del G7 en Italia, y donde la habría expresado su incomodidad con el interlocutor chileno. Según la conversación que habría tenido Caputo con sus pares del gabinete, el gobierno argentino espera llevar las conversaciones con Luis Cubeddu, el subdirector del Departamento del Hemisferio Occidental que lidera Valdés.
En medio de un momento delicado para el Mandatario, con alza del desempleo y una profundización de la recesión, Milei atacó esta semana a Valdés, a quien responsabilizó de tolerar en el gobierno trasandino anterior un aumento de los pasivos acumulados en el Banco Central (Puts), lo que complicaría hoy una mejor aplicación del programa de gobierno del libertario. “No sólo es responsabilidad del gobierno anterior y del Banco Central anterior, sino también de algún técnico del Fondo Monetario Internacional que avaló esto o que hizo la vista gorda con esto…. Algún técnico del FMI que pueda tener vínculos con el Foro de San Pablo (instancia que reúne a grupos políticos de izquierda Latinoamericana)”, dijo el lunes Milei a Radio Mitre, sin identificar a Valdés.
El exministro de Hacienda del segundo gobierno de Michelle Bachelet, es el interlocutor del FMI frente a las negociaciones con Argentina y quien tuvo a su cargo el informe de más de 100 páginas que dio a conocer el organismo recientemente. El texto le exige al gobierno de Milei que devalúe y levante el cepo cambiario. Los términos exigidos por el FMI han incomodado a Milei y al propio ministro de Economía argentino, Luis Caputo.
El FMI pidió un sistema de flotación administrada del tipo de cambio, parecido al que opera en Uruguay y Perú. Esto significaría, además, mantener “vivo” al Banco Central, organismo que Milei prometió eliminar, y olvidar el plan de la dolarizar la economía.