El Fondo Monetario Internacional pidió a sus miembros que aumentaran la asistencia a los países pobres para hacer frente al covid, diciendo que el crecimiento económico será limitado hasta que el virus esté bajo control en todas partes.
Los miembros del FMI deberían buscar formas de ampliar aún más los créditos con condiciones favorables para ayudar a las naciones de bajos ingresos a acelerar la vacunación, dijo Kristalina Georgieva, directora gerente del fondo. Eso significa tanto dirigir a esas naciones los activos de reserva existentes llamados derechos especiales de giro, conocidos como DEG, como explorar una nueva emisión de los activos, dijo.
“La pandemia nos ha vuelto a todos más sobrios sobre nuestra interdependencia”, dijo Georgieva en una entrevista televisiva con Tom Keene para la cumbre virtual de Bloomberg “The Year Ahead”. “Tenemos una señal muy fuerte de nuestro mayor accionista, Estados Unidos, de que vamos a trabajar más juntos, desde el tema del clima hasta ayudar a los países en desarrollo en esta crisis”.
El Gobierno de Donald Trump bloqueó la creación de US$500.000 millones de reservas el año pasado, diciendo que no se dirigen a los países pobres porque se les entrega a las economías en proporción al tamaño. Legisladores demócratas han instado al presidente Joe Biden a apoyar el plan, y la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha dicho que su equipo analizará un rango completo de formas de ayudar a las naciones vulnerables.
El FMI registró una demanda récord de créditos el año pasado, dado que las restricciones para contener la propagación del virus paralizaron gran parte de la economía mundial, lo que aumentó las necesidades de financiamiento. El FMI ha otorgado más de US$100.000 millones en nuevos créditos y garantías a más de 80 países desde marzo, en su mayoría con condiciones limitadas o nulas, y ha duplicado los límites de acceso anual a créditos de emergencia.
África representa la mayoría de los prestatarios pandémicos del FMI, y la mayoría de los países de la región buscan ayuda. El FMI quiere que los países africanos puedan priorizar la atención médica y las vacunas para ayudar a economías que se han visto muy impactadas durante el último año, dijo Georgieva.
“Por primera vez en décadas, la pobreza aumenta, el hambre aumenta”, dijo Georgieva. “¿Por qué deberíamos preocuparnos por eso en todas partes? Porque contamos con economías en desarrollo para un crecimiento dinámico. Si no crecen, eso es malo para la economía mundial”.
El FMI estima que la aplicación acelerada de vacunas en todo el mundo podría aumentar los ingresos mundiales en US$9 billones para 2025.