El mayor fondo de cobertura del mundo que cotiza en bolsa se prepara para una liquidación en los mercados emergentes, una opinión que lo enfrenta a los alcistas de algunos de los principales bancos de inversión de Wall Street.

Según Man Group, que administra US$138.000 millones en activos, casi la mitad de ellos en Europa, Medio Oriente y África, el espectacular repunte de los activos de riesgo de este año no se justifica por la mejora de los fundamentos económicos, y está destinado a revertirse.

“Esperamos que la liquidación se produzca en los próximos dos meses”, declaró a Bloomberg en una entrevista Guillermo Osses, responsable de estrategias de deuda de mercados emergentes del fondo con sede en Nueva York. “La gente ha agregado exposición, probablemente una gran parte del rally ya se produjo, y ahora se encuentran muy largos en activos de riesgo con valoraciones muy ajustadas cuando las condiciones de liquidez están cambiando. Por eso creemos que habrá una venta significativa”.

Las valoraciones de los bonos de mercados emergentes están perdiendo atractivo. Las acciones de Man Group, con sede en Londres, han subido un 23% en lo que va del año, frente a una subida del 6% en el FTSE 100. Su visión bajista sobre los mercados emergentes contrasta con el optimismo de los gestores de fondos, desde Morgan Stanley Investment Management a Goldman Sachs, mientras que incluso algunos alcistas afirman que la ferocidad del repunte los hace ser más selectivos.

Osses declinó hacer comentarios sobre el posicionamiento o las recomendaciones del grupo, citando la política de la empresa. El fondo de deuda de mercados emergentes que administra superó al 99% de sus homólogos el año pasado, cuando advirtió del riesgo de default y obtuvo una rentabilidad del 2,4%, frente a una pérdida promedio del 14% entre sus homólogos, según datos y clasificaciones recopilados por Bloomberg.

Inyección de liquidez

La opinión de Osses se basa en gran medida en el descenso del saldo de efectivo del Tesoro de Estados Unidos desde fines de octubre, que según él supone una inyección masiva de liquidez que los inversionistas han pasado por alto. El efectivo del Tesoro estacionado en la Reserva Federal se redujo en unos US$349.000 millones entre fines de octubre y mediados de enero, aunque desde entonces ha aumentado ligeramente.

Dijo que el dinero extra en el sistema financiero procedente de EE.UU. explica por qué no ha habido grandes respuestas del mercado a veces incluso a “noticias fundamentales terribles” en los mercados emergentes.

“En nuestra opinión, la única explicación que se nos ocurre para el significativo repunte es la inyección de liquidez del Tesoro estadounidense”, afirmó Osses. “La acción de los precios en el mercado no es coherente con los fundamentos porque esta inyección de liquidez fue masiva. Por eso los activos subieron y, creemos, ignoraron las noticias sobre los fundamentales. La gente racionaliza estas cosas después de un rally”.

Rally de bonos

Los bonos de mercados emergentes registraron el mes pasado su mejor repunte en más de una década, con una rentabilidad de la deuda en divisas fuertes cercana al 13% desde mediados de octubre. Muchos inversionistas han vuelto a esta clase de activos por las apuestas de que la Reserva Federal detendrá los aumentos de tasas de interés y la reapertura de China estimulará el crecimiento económico en los países en desarrollo productores de materias primas.

Morgan Stanley Investment Management, que tiene US$1,3 billones en activos bajo gestión, dijo a principios de este mes que abandonaría las acciones estadounidenses para aumentar su exposición a los mercados en desarrollo. JPMorgan Asset Management y Legal & General Investment Management prevén que la deuda de mercados emergentes genere a los inversionistas hasta un 10% este año.

Los fondos de deuda dedicada a mercados emergentes han captado US$8.000 millones en el año transcurrido hasta el 1 de febrero, según los analistas de Bank of America, que citan datos de EPFR Global.

Las medidas que el Tesoro de EE.UU. empezó a aplicar en enero han invertido la evolución de sus saldos de caja en la Fed, dijo Osses. A fines de enero, sus saldos en la Fed aumentaron, provocando una reducción de la liquidez que operó como endurecimiento cuantitativo y coincidió con una reversión de los rendimientos del Tesoro.

Cautela en China

“Esperamos que el retiro de liquidez produzca una liquidación, que se verá agravada por el hecho de que los inversionistas poseen mucho riesgo y tienen posiciones más grandes que necesitan liquidar”, afirmó.

También se mostró escéptico ante la posibilidad de que la reapertura de China suponga un estímulo para otros países emergentes, citando el crédito chino cercano a mínimos históricos. “Aunque algunos dicen que la demanda de materias primas de China apoyará a los países emergentes, no vemos datos consistentes con tal hipótesis”, dijo.