Las ganancias de CCU sumaron $48.516 millones en el primer trimestre cifra que representó un descenso de 14,5% frente al mismo periodo del año anterior, arrastradas por un impacto negativo de variaciones de tipo de cambio, pese a que la compañía, controlada por el grupo Luksic y Heineken, tuvo un importante aumento en su volumen de ventas.
El Ebitda (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) cayó 10,8% a $100.427 millones explicados principalmente por la fuerte depreciación del peso chileno y el peso argentino frente al dólar, que se devaluó 10,8% y 122,5% respectivamente, aumentando los costos asociados al dólar y también por la devaluación de 96,7% del peso argentino frente al peso chileno, afectando la consolidación del resultado de la operación en Argentina.
"En este primer trimestre, CCU logró mantener un sólido crecimiento en volumen en un entorno altamente competitivo, mientras que los resultados financieros se vieron impactados por los significativos efectos adversos de la devaluación de las monedas locales. CCU continuará ejecutando iniciativas de gestión de ingresos, junto con mayores eficiencias, con el fin de seguir generando un crecimiento rentable y sostenible", señaló la compañía.
Los ingresos por ventas subieron 1%, impulsados por un crecimiento de 6,6% en volumen, contrarrestado por un 5,2% de menor precio promedio en pesos chilenos. El aumento del volumen consolidado fue impulsado por un aumento de 12% y 4,8% en el volumen de los segmentos de operación Negocios Internacionales (que incluye Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay) y Chile, respectivamente, parcialmente contrarrestado por una disminución del volumen de 0,8% en el segmento de operación Vinos.
La disminución de un 5,2% en el precio promedio en pesos chilenos se explicó principalmente por un 96,7% de depreciación del peso argentino contra el peso chileno, reduciendo los ingresos por ventas en pesos chilenos en el segmento de operación Negocios Internacionales, a pesar de los incrementos de precios en moneda local, y por precios promedios un 0,9% más bajos en el segmento de operación Chile, explicados por el mix de producto y las actividades promocionales, fuertemente impulsadas por el canal moderno.
En el segmento de operación Vinos, el precio promedio aumentó 7,4%, debido a precios más altos en el mercado doméstico, así como por el impacto favorable de la apreciación del dólar en los ingresos de exportación.