Mayores ingresos y menores gastos. Esa fue la combinación que permitió que el cierre fiscal 2018 fuese mucho mejor que el proyectado en septiembre, y que fue entregado ayer por el ministro del Hacienda, Felipe Larraín, y el director de Presupuestos, Rodrigo Cerda, con un inesperado protagonista: los US$1.100 millones en impuestos que se pagaron al Fisco por la operación de venta de acciones de SQM de Nutrien a la empresa china Tianqui.
En ese contexto, las autoridades de Teatinos 120 detallaron que los ingresos efectivos de 2018 durante el período llegaron a 21,9% del PIB, equivalente a un alza real de 8,8%, como consecuencia del mayor crecimiento económico que Hacienda estimó en 4% para 2018, el mejor precio del cobre (que promedió US$2,96 la libra) con fuerte incidencia en la recaudación del impuesto a la Renta por las mineras privadas (GMP10), con una variación positiva de 83,0% y de 21,4% en los traspasos de Codelco (Cobre Bruto) versus 2017, mientras que respecto de la recaudación no minera, por el crecimiento real de los ingresos por IVA de 5% (que "pesa" el 47% en la recaudación total) y por la operación Tianqui, que reportó el equivalente a 0,3 puntos del PIB en ingresos adicionales (ver tabla).
En tanto, el gasto creció sólo 3,4%, su menor incremento en siete años, marcado por el decreto de contención de esta variable que se anunció en marzo -del orden de US$1.100 millones-, el que comenzó a aplicarse en el tercer trimestre.
Esta es la primera vez desde 2012 que el gasto fiscal crece menos que el PIB (4%), lo que hizo disminuir levemente el tamaño del gasto como proporción de la economía, pasando de 23,6% a 23,5% del PIB.
Déficit efectivo
De esta forma, el balance efectivo 2018 mejora desde el -2,8% del PIB (cierre 2017) hasta -1,7%, cifra mejor que la proyectada en septiembre(-1,9%), mientras que el Balance Estructural también mejora al pasar desde un -2% (2017) hasta -1,5%, también mejor que la última estimación realizada por el Ministerio de Hacienda el año pasado (-1,8%).
Felipe Larraín destacó las cifran marcan "una significativa mejoría de la posición fiscal. Esto no es fruto de la casualidad y tiene dos partes: la mejora de ingresos y la contención de gastos".
En todo caso, el jefe de las finanzas públicas fue enfático en señalar que para este año no está programado un nuevo decreto de contención de gasto no obstante que se seguirá trabajando en medidas para hacer eficiente el uso de los recursos fiscales, y que tampoco se prevé acelerar la reducción del déficit estructural (programado en 0,2% del PIB anual hasta 2020) dados los buenos resultado del año pasado. Esto, aseveró, porque los ingresos de la operación Tianqui fue excepcional.
"No estamos alterando ese camino que habíamos planteado. Si obedeciera a causas que no fueran una operación puntual sería diferente: podríamos haber gastado más, pero fue una decisión de política económica no gastarse los ingresos transitorios que vienen de una operación puntual", señaló el ministro.