General Electric renace tras pasar por un oscuro periodo y lo hace de la mano de la venta de su gigantesco negocio biofarmacéutico.

El otrora mayor conglomerado industrial del planeta anunció la venta de su unidad BioPharma a Danaher Corp., operación que se valoró en US$ 21.400 millones.

Gracias a este anuncio, las acciones experimentan un salto de 19% en Wall Street y acapara todas las miradas de los inversionistas.

Este sería un paso transformador e importante en el esfuerzo del nuevo CEO y presidente de la Junta de General Electric, Larry Culp, para rescatar a la gigante multinacional de los problemas que ha tenido el último tiempo.

"Esta noticia acelera significativamente nuestro plan de inicio", dijo Culp, quien tomó las riendas de GE en octubre.

"Se puede ver que la marea comienza a cambiar cuando realmente podemos centrarnos en un poco menos de defensa, a un poco más de ofensiva", agregó.

El acuerdo con Danaher Corp da cuenta del enfoque agresivo de Culp para sacar a GE de una de las peores crisis de sus 127 años de historia.

Culp, quien se convirtió en CEO del fabricante con sede en Boston después de la sorpresiva expulsión de John Flannery, ha estado reformando la cartera mientras busca recortar gastos y pagar deudas.

Las acciones avanzaron 34% este año hasta el 22 de febrero, la mayor ganancia en un subíndice de Standard & Poor de empresas industriales estadounidenses.

Además, el costo de asegurar contra un incumplimiento de GE se redujo al más bajo en cuatro meses. En cuanto a los swaps de incumplimiento crediticio a cinco años vinculados a la compañía cayeron 25 puntos básicos a 104,5, según los precios compilados por CMA.

Por el lado de las acciones de Danaher Corp subieron a US$121, lo que equivale un alza de 6,6%.

Desde Danaher, dicen que el acuerdo de GE sería la mayor adquisición de la compañía por un amplio margen y debería reformular su negocio y convertirlo en un importante proveedor de tecnología y herramientas para las compañías de biotecnología y medicamentos.

El acuerdo, que se espera que finalice a fines de año, no está sujeto a una condición de financiamiento ni a una votación de los accionistas, dijo GE en un comunicado y dejará a GE con un negocio de US$ 17 mil millones para la fabricación de máquinas de resonancia magnética y otros equipos de imágenes.