General Electric (GE) anunció el martes que planea escindirse de su negocio de atención de salud y separar a la compañía de servicios petroleros Baker Hughes, en un intento por reestructurar las operaciones y enfocarse en sus unidades de aviación, distribución de electricidad y energía renovable.
La noticia se produce un día después de que GE Co acordó vender su unidad de distribución de energía por US$3.250 millones al grupo estadounidense Advent.
La unidad de salud de GE desarrolla sistemas de diagnóstico de imágenes como resonancias magnéticas y rayos X, además de pruebas clínicas como ultrasonido. El negocio registró US$19.110 millones en ingresos en 2017, lo que representa más de 15% de las ventas anuales del conglomerado.
El grupo industrial compró Baker Hugher en julio del 2017 y lo combinó con sus servicios de petróleo y gas para crear una nueva compañía en la que GE tiene una participación cercana al 62,5%. La unidad de petróleo y gas reportó ventas de US$17.230 millones en 2017.
GE dijo que planea reducir su deuda neta industrial en US$25.000 millones el 2020 y mantener más de US$15.000 millones en su hoja de balance.
