Una junta de accionistas intensa, como era esperable, fue la que este martes permitió a Enel Américas, holding resultante de la división de la antigua Enersis entre Chile y el resto de la región, aprobar un aumento de capital por US$3.000 millones, la segunda mayor operación de este tipo que se realiza en el mercado nacional. La primera, de hace seis años, la protagonizó la propia Enersis, también con polémica.
El gerente general de Enel Américas, Maurizio Bezzeccheri, fue quien estuvo a cargo de la operación desde el comienzo, previo al anuncio dado a conocer en febrero, hasta ahora cuando lo más complejo quedó atrás. En entrevista con PULSO detalla cómo fue todo este proceso y, dado su cargo de director del grupo Enel para Sudamérica, también entra en la discusión por la instalación en el país de medidores inteligentes y la propuesta de rebajar la rentabilidad del sector.
Ustedes señalaron que un objetivo en la junta de accionistas era lograr el máximo respaldo posible a la operación. ¿El 72% alcanzado los deja conformes?
-Es muy difícil que una operación de este tipo consiga el 100%. Con el esfuerzo desplegado, con 150 reuniones que tuvimos en Chile, América, Europa, Asia, para explicar el por qué del aumento de capital, queríamos conseguir una gran mayoría.
Pero consideremos que también las AFP que votaron en contra, lo hicieron contra el monto del aumento, no contra la operación. Entonces, el fundamento del aumento de capital fue entendido.
¿Entonces, la necesidad de concretar esta operación fue entendida?
-La gran mayoría de las personas entendieron por qué era necesario el aumento de capital. La CMF descartó que fuera entre partes relacionadas y en EE.UU. dos proxy advisors se manifestaron, uno a favor y el otro en contra. Hemos tenido largas discusiones sobre el monto. (…) Evidentemente, el 28% se beneficiará de los resultados del aumento de capital. Supongo que le dará las gracias al otro 72% que le permitirá beneficiarse de los resultados.
¿Siente que hubo algo de temor dado que en Chile no es común que se realicen operaciones de esta magnitud?
-Los US$3.500 millones eran el segundo aumento de capital tras el que se hizo de Enersis. Por eso observamos que había una gran oportunidad, porque desde el gobierno y distintas instituciones se empuja para que la plaza local sume prestigio a nivel regional y por eso tiene que promover operaciones de este tamaño si quiere crecer.
Sobre el monto, todos entendían, a pesar de la duda de si era o no una OPR (Operación entre Partes Relacionadas), cosa que no cambiaba nada, sólo el tiempo, que los US$2.600 millones iban a pagarse sí o sí. Por eso se propuso bajar a esa cifra.
Los minoritarios tienen dos caminos: ir al aumento de capital o diluirse. ¿Qué espera que hagan los minoritarios?
-A diferencia del pasado, en el cual Enersis había sido involucrado en una operación entre cash y activos, en este caso era todo cash. Siendo así, todo el mundo puede participar. Ya pasó en el pasado que alguna AFP votó en contra del aumento de capital y después acudió al aumento de capital. Puede ser que sea lo mismo ahora. Creo que todos, o la gran mayoría de los accionistas de Enel Américas, creen en el negocio, creen en el management, en el directorio. Por todo esto yo creo que sí acudirán.
¿Sienten que existe desconfianza del mercado hacia las operaciones de empresas controladas por Enel SPA?
-Enel nos prestó US$2.650 millones para poder acceder a la inversión en Eletropaulo, cuando estábamos a la víspera de la elección brasileña, con una incertidumbre importante. Si a futuro alguien quiere hacer préstamos de esta naturaleza, estamos encantados.
(…) Cuando hay empresas que están manejadas en forma subóptima, hay una oportunidad. Nosotros podemos agregar valor, porque tenemos el soporte de nuestro mayor accionista porque es el mayor distribuidor de energía privado. Enel sirve a 73 millones de clientes y no de ahora, sino hace años. Esto significa que tenemos procesos, procedimientos, servicio, atención, meteorología, que ningún otro tiene, porque no tiene 73 millones.
Cuando se tiene el anuncio del aumento de capital cae 16%. Evidentemente el título cae porque alguien vende la acción. Y si haces un googleo, te dará la respuesta. La declaración de comprar 5% adicional era una señal de que el accionista mayoritario confía en la situación de la compañía.
Por tanto ¿descarta que estas operaciones buscan solo fortalecer a la matriz?
-Esta era una crítica que estaba detrás de la tesis de la operación entre partes relacionadas (...) Pero es otra cosa, hay un crédito que se tomó en septiembre del año pasado y que hoy tienes que pagar sí o sí, o la pagas con un aumento de capital o tomando más deuda. Si tomas una nueva deuda, no hay beneficio. Entonces hay que darle las gracias a Enel por haber hecho este préstamo puente.
¿Sigue siendo eficiente para ustedes esta estructura de un holding regional basado en Santiago?
-Lo que está detrás es lo siguiente. Estamos en dos mundos, uno de Chile, donde evidentemente el mercado era mucho más estable, y con menor potencial de crecimiento. Entonces, esto se direccionaba a inversionistas que buscaban un rendimiento seguro. Y creamos Enel Américas para un mundo en el cual tienes menos estabilidad, pero un potencial de crecimiento mucho más alto. Mira el tamaño de Brasil, Colombia. Perú es más pequeño pero viene con una tasa de crecimiento impresionante, con un potencial minero grande y un contexto político en vía de definición.
¿Qué posibles compras están mirando?
-Nosotros estamos monitoreando constantemente empresas, posibles target, observamos que hacen nuestros competidores, vemos qué puede ser valioso para nosotros, etc. Eso es permanente. En un momento determinado se abre una ventana, que no abres tú. Y vemos que 2019 va a ser un partido en el cual se produzcan reorganizaciones en el sector.
Pero así como se produjo en Chile la absorción de las actividades de Enel Green Power, ¿podrían hacer lo mismo en Enel Américas?
-Por el momento eso no está arriba de la mesa. Nosotros estamos enfocados en Latinoamérica en las operaciones de crecimiento de distribución, de crecimiento de servicios. También en desarrollar la renovable que ya tenemos que es la energía hidroeléctrica, que es la mayoría de la capacidad instalada que tenemos en Enel Américas.
¿Existe coordinación con Enel Chile para competir por los negocios de Sempra en Chile y Perú?
-Son dos compañías distintas, tenemos un accionista de referencia que está prestando los recursos a una y a la otra. Pero son dos procesos separados.
Medidores: "Alguien quiere que la gente se quede en la edad de las cavernas"
¿Les preocupa que en Chile haya cambios regulatorios incluso antes de que las normas empiecen a regir?
-En toda esta discusión sobre medidores inteligentes me chocó mucho que ninguna discusión se abrió sobre el por qué de los medidores inteligentes, sobre los beneficios que podrían tener los clientes. Entonces me pregunto, cómo se puede tomar una decisión si no se ha aclarado, si no se sabe qué beneficio tiene. El medidor inteligente te permite tener toda una serie de servicios que de otra forma no tendrías. Es un habilitador.
¿Qué pasa en otros países?
-En Italia existen más de 40 millones de mediadores inteligentes instalados, es una cosa que existe. Incluso en Argentina también tenemos muchos medidores inteligentes y en Chile tenemos este debate. Deduzco que alguien quiere que le gente se quede en la edad de las cavernas. Me parece fenomenal. Respeto la decisión.
La polémica central es que lo tiene que pagar el cliente.
-Sí, hay una polémica de quién lo paga. Es lo mismo que el cable, el transformador, todo esto son piezas que te permiten que llegue a tu casa la energía. Por lo tanto, es normal que esto entre en la base de activos con que se calcula la tarifa.
¿La tarifa qué paga? Paga impuestos, paga el ejercicio de la distribución y paga la energía que la distribuidora compra para venderla a los clientes. Estas tres cosas pagan toda la inversión, y tiene un margen razonable para la empresa.
¿Hubo este debate en otros países?
-No. El chileno se imaginaba que iba a tener que pagar en la factura del mes siguiente US$100, esto no es así. Tú lo pagas en 20 años. Entonces, estamos hablando de un pequeño costo, donde evidentemente al final tienes un beneficio de optimizar la tarifa, tener intervenciones más rápidas, etc. Todas esas cosas no las he visto en el debate.
¿Le llama la atención eso?
-Todo este debate le genera un daño al cliente final, porque no le permite utilizar una herramienta útil.