El gobierno chileno colocó este jueves una deuda en pesos por el equivalente a en los mercados internacionales, en una operación estructurada en dos tramos que es liquidable por agentes locales.
El emisor vendió deuda por $440.000 millones a cinco años con un rendimiento de 4,12%, con un cupón de 4%. La guía inicial de precio para el tramo se ubicaba en el área de 4,2%.
Además, el país emitió bonos por $610.000 millones a 12 años con un rendimiento de 4,85% y un cupón de 4,7%. La guía para el tramo de más largo plazo se estaba inicialmente en el área del 4,95%.
Desde Hacienda apuntaron que la emisión se realizó dentro del límite de presupuesto 2018, usando cerca de la mitad de la capacidad que tiene para emitir. "Los instrumentos colocados fueron el bono en pesos con vencimiento en 2023 (BTP-2023) y el bono en pesos con vencimiento en 2030 (BTP-2030), por $440.000 millones y $610.000 millones, respectivamente", detallaron en un comunicado.
La emisión se realizó en pesos ya que la estrategia sería colocar la mayor parte de la deuda en moneda local.