En su día 36, finalmente los trabajadores eventuales del Terminal Pacífico Sur (TPS) del Puerto de Valparaíso, ligado a la familia Von Appen, puso fin a las paralizaciones en el puerto de Valparaíso, que se iniciaron el pasado 16 de noviembre.
Esto, luego que la Ministra de Transportes, Gloria Hutt; el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg y dirigentes sindicales de la compañía firmaran un segundo acuerdo, el que esta vez fue ratificado por la asamblea de trabajadores eventuales de la compañía. Aunque este documento no cuenta con la firma de la empresa, en su cuarto punto, los ministros se comprometen a ser garantes de los compromisos pactados.
Fuentes de TPS cuentan que la compañía no concurrió al acuerdo suscrito por el Gobierno y los trabajadores eventuales, porque su programa de ayuda en favor de este tipo de trabajadores fue establecido unilateralmente, con anterioridad a la negociación de dicho acuerdo.
El miércoles de esta semana, TPS informó que se mantenía vigente su propuesta para los trabajadores eventuales que se reintegraran a trabajar, en la medida que no hayan participado en los hechos de violencia registrados en Valparaíso.
De todas maneras, la empresa no está obligada a firmar el documento, ya que sólo deberán cumplir con la oferta ya entregada a los trabajadores, puesto que las mejoras vinieron desde el gobierno a través de cursos de capacitación.
Puntos del acuerdo
El protocolo firmado entre el gobierno y los dirigentes, luego que se rechazara un preacuerdo el miércoles pasado, contempla a costo de la empresa un préstamo de Ultraport de $550 mil, una gift card de $250 mil, un aguinaldo de $75 mil y una caja de mercadería.
Pero el punto que llevó a finalmente destrabar la negociación fue el pago por cursos de capacitación, que el gobierno financiará a través de becas sociales del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), que está contemplado en el ítem de franquicias tributarias.
Esto corresponde a dos cursos de capacitación en seguridad que se impartirán en enero del próximo año, que en total tienen un costo de $750 mil, y un curso de oficios para julio que asciende a $400 mil. Es decir, cada trabajador recibirá para su bolsillo $1.150.000 por asistencia a esas capacitaciones. Esto, en cierta forma, viene a suplir el bono de precariedad laboral por $2 millones que estaban solicitando los portuarios al inicio de la movilización.
De esta forma, entre lo que entregará la empresa, contando el préstamo, y el fisco, la oferta total asciende a $2.025.000 por trabajador.
En total serán alrededor de 400 trabajadores eventuales serán beneficiados con estos cursos de capacitación, o sea $460 millones.
El ministro Monckeberg -que junto a su asesor Mario Livingstone estuvieron permanentemente intentanto establecer acuerdos con los trabajadores- señaló que esto no tendrá un costo fiscal directo, pero sí indirecto a través de aquellas franquicias no utilizadas por otras empresas, que en la práctica pueden ser redestinadas a otras firma por las OTIC (becas sociales).
Es decir, esta vez el gobierno por decisión unilateral, y para desactivar el conflicto, destinó los recursos a los trabajadores eventuales de la empresa de la familia Von Appen.
Además, en otro punto del acuerdo se estableció que las partes fueron informadas por TPS que la firma no ejercerá represalias en contra de los movilizados.