El próximo miércoles 1 de agosto la sala de la Cámara de Diputados revisará y comenzará la votación del proyecto de Pago Oportuno, que busca establecer normas especiales para el pago de facturas a las micro, pequeñas y medianas empresas. Por lo mismo, desde el gobierno han intensificado las gestiones con parlamentarios y gremios de las pequeñas y medianas empresas (pymes), para aprobar la iniciativa legal.

Sin embargo, el escenario para el Ejecutivo no es muy próspero. Renovación Nacional ya pidió cambios al proyecto y la Democracia Cristiana adelantó que rechazará la iniciativa tal cual se ingresó al Congreso por parte del gobierno (ver recuadro).

Además, los gremios de las micro, pequeñas y medianas empresas se han comunicado con los parlamentarios para desechar la iniciativa legislativa, pues, para ellos no cumple con el compromiso adoptado por el Ministerio de Economía y el propio Presidente Sebastián Piñera.

Frente a este contexto, el viernes a las 9.00 horas en La Moneda, el Presidente junto al ministro de Economía, José Ramón Valente, se reunirán con los principales gremios de las pymes, entre ellos la Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme), ProPyme, y la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), con el propósito de buscar acuerdos y aprobar el proyecto.

Pero estas no son las primeras gestiones que se hacen desde el gobierno. La semana pasada el ministro Valente junto al subsecretario, Ignacio Guerrero, se reunieron con gremios pymes con el objetivo de desactivar el rechazo público de la iniciativa que se tramita con suma urgencia. De hecho, participantes de estas reuniones reconocen que se les solicitó explícitamente no referirse al proyecto, advirtiendo que de no avanzar será muy difícil regular el pago de los proveedores.

Hay que recordar que a mediados de mayo, el Ejecutivo envió una indicación sustitutiva a una moción parlamentaria que ya había sido aprobada en el Senado, por lo que de ser visado este martes deberá ir a comisión mixta.

Rechazo de las pymes

Pese a todas las gestiones, las pymes dicen estar firmes en su postura: no aceptarán el proyecto mientras mantenga el plazo de pago en 60 días y piden que se incorpore la retención del IVA Crédito Fiscal para quienes no cancelan a tiempo a sus proveedores. A esto se agrega que el proyecto contempla la posibilidad de generar contratos escritos por las partes para aumentar el período de pago; lo cual también es un punto de oposición de las pymes.

El presidente de la Conapyme, Juan Araya, señaló que "veo muy malo el panorama con este proyecto, porque el Presidente se había comprometido con pago en 30 días. Ahora tal como está, nosotros rechazamos el proyecto".

El director ejecutivo de Pro Pyme, Rodrigo Bon coincide con Araya y sostuvo que "el proyecto ha perdido su objetivo en cuanto a formato y fondo. De cara al formato el proyecto hoy carece de "carne" de pilares esenciales como el plazo a 30 días y el IVA Crédito".

Y agregó que "en cuanto al fondo, el proyecto en su génesis buscaba colocar fin al abuso en materia de pago que sufren las empresas Mipymes y ese foco inicial y se ha perdido. Si bien desde Pro Pyme hemos mantenido un diálogo abierto con gobierno, no concordamos con los argumentos expuestos".

En esta misma línea, el secretario general de la Cámara de Comercio de Santiago, Cristián García Huidobro sostuvo que "nos preocupa que se deje abierta la posibilidad de pactar consensualmente los plazos de pagos. Esta alternativa puede convertir la ley en letra muerta. Resulta algo absurdo acotar plazos de días para los pagos y, a continuación dejar abierta la puerta a la convención de las partes".

Asimismo, el presidente de la Confederación Nacional de la Pequeña Industria y Artesanado de Chile (Conupia), Roberto Rojas dijo que "este es un mal proyecto, no es ni redondo como dice el ministro (Valente). No nos ayuda a resolver lo medular del asunto y es que queremos pago a 30 días y no a 60 como lo estableció el Ejecutivo. De hecho desde el gobierno presentaron esta propuesta como si hubiese acuerdo entre las partes, pero para nosotros esto es imposible".

La Conupia, la Unapyne, la Confecoop. Conttramen, además de otros gremios y asociaciones regionales, enviaron una carta a todos los diputados pidiendo el rechazo del proyecto. La misiva además marcaba otro punto de discordia: "la indicación del Ejecutivo agrava el deterioro de las pymes al proponerse que para el caso de los servicios de salud y municipios esta Ley entre en vigencia 36 meses después".

Diputados DC rechazarán proyecto

La bancada DC ya tomó una posición y decidió que los 14 diputados que conforman su comité no apoyarán el proyecto de Pago Oportuno que se votaría el próximo miércoles en la sala de la Cámara. "Estamos anunciando el rechazo al proyecto tal como ha quedado con todos los cambios que el gobierno hizo y las indicaciones que prometió y que nunca ingresó. Esto, en respaldo a las pymes.

Hay una asimetría importante en lo que ocurre hoy con las grandes, medianas y pequeñas empresas y no se incorpora el tema del IVA que a nuestro juicio era el nervio y el corazón del proyecto.

Mientras no se ingresen cambios sustanciales, este proyecto tiene nuestro rechazo", indicó el diputado Gabriel Silber, integrante de la Comisión de Economía. Otra de las críticas al proyecto es que se estableció el pago a 60 días y no a 30 como solicitaban las pymes. "

Tal como está el proyecto, es letra muerta; al no incorporarse el IVA en forma correcta, es pan para hoy y hambre para mañana", expresó por su lado la diputada Joanna Pérez de la Comisión de Desarrollo Social. ML