Gobierno logra avanzar el primer paso del veto del Ingreso de Emergencia

Por una amplia mayoría, la Cámara de Diputados aprobó esta tarde la decena de observaciones del Presidente Sebastián Piñera que conformaron el veto para insistir con la entrega de un Ingreso Familiar de Emergencia por los siguientes tres meses, a familias pertenecientes al 60% más vulnerable.

Tras una abrupta tramitación que implicó el rechazo de los montos y de la aplicación del beneficio, lo cual obligó al gobierno a enviar un veto, la oposición terminó apoyando la idea, y sólo se abstuvieron los diputados del Frente Amplio y del PC en los artículos relacionados con los montos y los beneficiarios.

Previamente, habían anticipado su accionar en la Comisión de Hacienda que aprobó por 11 votos a favor y 2 abstenciones del presidente de la Comisión, diputado Daniel Núñez (PC) y del diputado Giorgio Jackson (FA). Ambos consideraron que la suma del aporte es insuficiente.

El veto del gobierno mantuvo el monto del beneficio y que sea descendente en el tiempo, es decir, que se entregará un bono per cápita de $65.000 el primer mes; $55.250 el segundo; y $45.500 el tercero. Adicionalmente, se aplana la entrega en un solo tramo, al 60% de los hogares más pobres. Y se incorpora al pago del segundo y tercer bonos, a los mayores de 70 años que reciban pensión básica solidaria y vivan solos.

“Quiero agradecer a todos quienes estando disconformes con los montos han dado un paso adelante aprobando el proyecto, porque eso es lo que piden los chilenos en tiempos de crisis, esta es una señal de encuentro. Hay una invitación abierta para ver qué seguimos haciendo, esto no se agota acá”, manifestó el ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel.

En la misma línea, su par de Hacienda, Ignacio Briones reconoció que en la discusión de esta iniciativa hubo “diferencias legítimas”, pero valoró que en el fondo todos coincidieran en la necesidad de atender con urgencia los ingresos de las familias más vulnerables. “Esta es una medida nunca vista, excepcional, pero no es ni la segunda ni la última ayuda”, recalcó.