De manera unánime y tras un protocolo de acuerdo con el gobierno, los senadores de la comisión de Trabajo del Senado aprobaron la idea de legislar el proyecto que garantiza acceso universal a Sala Cuna, el cual está siendo impulsado por los ministerios del Trabajo y de Mujer y Equidad de Género.

"Esto es una muy buena noticia para Chile porque se da el primer paso. En votación unánime se votó la idea de legislar del proyecto que otorga derecho a sala cuna a todos los hijos de madres trabajadoras de nuestro país. Para nosotros es tremendamente importante porque este proyecto pone fin a una discriminación que estaba siendo mucho más difícil a las mujeres participar del mundo del trabajo", dijo el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg a PULSO tras la votación, refiriéndose a las restricciones que tiene el Código del Trabajo para el acceso a este derecho.

"Estamos muy contentos con este avance, que nos permite poner fin a una discriminación entre trabajadoras y levantar la mayor barrera a las oportunidades de empleo para miles de mujeres" aseguró la ministra Plá. En la misma línea, la secretaria de Estado afirmó que "Este proyecto de ley es una prioridad para el Gobierno, para fomentar la participación laboral y la corresponsabilidad entre hombres y mujeres".

Pero para lograr esta votación, el gobierno tuvo que ceder y modificar cuatro puntos de la iniciativa.

El primer punto, y el más complejo, tenía que ver con el evitar el copago de la sala cuna, es decir, la diferencia del costo entre el subsidio que se entregará a la trabajadora, $245.000 y el costo real de ésta, que en promedio es de $330.000.

"La Ley va a establecer que no se podrá cobrar matrícula ni mensualidad al beneficiario de este fondo de sala cuna para garantizar que las trabajadoras no tengan que poner plata de su bolsillo, porque la idea es que el beneficio cubra la totalidad de la mensualidad que corresponda", dijo el secretario de Estado.

El segundo punto, tiene relación con la modalidad del beneficio, ya que el proyecto plantea 3 fórmulas respecto a la jornada de la trabajadora: completa, media y si trabaja menos de 15 horas semanales.

"Se reduce a dos modalidades. Una es el pago del beneficio completo para el trabajador de jornada completa y el pago de dos tercios del beneficio para las trabajadoras de jornada parcial (30 horas)", sostuvo la autoridad.

El tercer punto tiene relación con el período de cesantía de la trabajadora. El ministro señaló que "la idea es que el seguro solidario de cesantía cubra también el pago de la cotización de sala cuna por el periodo de tiempo que la trabajadora esté cubierta por el seguro de tal manera que la trabajadora que pierda el trabajo pueda seguir accediendo al derecho de sala cuna".

Y el cuarto punto es respecto a la fiscalización del beneficio, ya que el proyecto señala que "si el niño o niña registra un promedio de asistencia menor al 50% en un período de 60 días corridos, se suspenderá el pago del beneficio".

"Acogimos los requerimientos de los senadores de objetivizar las causales de pérdida del beneficio por inasistencias graves e injustificadas, entendiéndose esto último como la inasistencia del niño por un tiempo prolongado sin ninguna justificación razonable. Esto excluye causas de enfermedades o causa mayor", explicó el ministro Monckeberg.

El financiamiento del acceso a sala cuna estará a cargo del empleador a través de una cotización del 0,1% que irá a un Fondo Solidario Universal. Este aporte será evaluado cada dos años, pudiendo subir sólo hasta un 0,4% de ser necesario.