Mucho se ha discutido en los últimos meses sobre el retiro de fondos de pensiones en casos excepcionales. Uno de los que generó más polémica, es cuando una persona tiene una enfermedad terminal.
Y pese a que no es un retiro de fondos per se, la reforma previsional del gobierno anunciada ayer propone que las personas que tengan una enfermedad catastrófica puedan recibir una mayor pensión, ya que los fondos que hayan acumulado durante su vida, serán calculados en base a su real expectativa de vida, y no según las actuales tablas de mortalidad que rigen para toda la población por igual.
De este modo, si actualmente el sistema calcula que los hombres vivirán en promedio hasta los 87 años y las mujeres hasta los 90 años, de aprobarse la reforma del gobierno, en el caso de afiliados con una enfermedad calificada como terminal por las Comisiones Médicas, se calculará la pensión usando una expectativa de vida ajustada a esta situación.
"Si yo tengo 62 años de edad y me diagnostican de una enfermedad terminal el horizonte de tiempo es bastante más acotado y lo que nosotros estamos planteando es que entonces bajo esa misma lógica su expectativa o su pensión se calcule con una expectativa de vida que es absolutamente troncal que tiene que ver con su realidad", dijo esta mañana, con conversación con Cooperativa, la ministra del Trabajo, María José Zaldívar.
"De esa manera el monto de la pensión sube considerablemente y también se genera la posibilidad de retiro de este excedente de libre disposición. Pero aquí hay que ser bien claros de que, cuando estamos hablando de una pensión, no sólo estamos pensando en la pensión para ese trabajador o ese pensionado, sino que también estamos pensando en las pensiones de sobrevivencia", añadió.