El Gobierno está dispuesto a revisar la norma que restringe la integración vertical en el mercado eléctrico -compuesto por los segmentos de generación, transmisión y distribución-, señaló ayer el representante del Ministerio de Energía, Javier Bustos, ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC).

Esto, en el marco de la solicitud que la española Celeo Redes -perteneciente al Grupo Elecnor y al fondo de pensiones holandés APG Infrastructure- ingresó en febrero para que evalúe cambios a la normativa que data de 2004.

Dicha regulación prohibe que las firmas de transmisión participen en el mercado de generación y distribución. Mientras que por su lado, las generadoras y distribuidoras sí pueden tener presencia en el segmento de la transmisión, con hasta 8% de participación.

"Hay cambios tecnológicos que se han producido y esperamos que se produzcan otros nuevos. Por lo tanto, sí creemos que vale la pena que esto sea revisado", señaló Bustos, que especificó que el Ministerio no está proponiendo cambios específicos.

"Queremos que el tribunal pueda analizar todos los antecedentes y en base a eso dar su visión para que podamos analizar el cambio regulatorio", añadió, especificando que de concretarse las modificaciones, éstas se realizarían sobre el artículo 7 de la Ley General de Servicios Eléctricos.

Por su lado, el abogado de Celeo Redes, Claudio Lizana, indicó que existe una asimetría regulatoria arbitraria en la normativa y acusó que ésta es innecesaria y genera "serias distorsiones competitivas".

Asimismo, explicó que la prohibición nació de la situación de mercado previa a la separación de Transelec, cuando ésta era controlada por Endesa (hoy Enel Generación), la principal generadora del país, que a la vez también poseía la mayor distribuidora (ex Chilectra).

"Las condiciones de concentración y competencia al interior del mercado que se tuvieron a la vista al momento de la dictación de esta norma eran radicalmente distintas a las que existen actualmente", dijo, añadiendo que la mencionada prohibición se justificó como forma de contrarrestar la falta de mecanismos para evitar conductas anticompetitivas.

Así las cosas, realizó tres propuestas: eliminar la prohibición y la limitación de propiedad; que se elimine la prohibición, pero que las firmas de transmisión puedan participar en generadoras y distribución a través de empresas relacionadas; y mantener la limitación de participación de 8% de generadoras, distribuidoras y clientes libres en firmas de transmisión.

Mientras que estas últimas, puedan hacerlo mediante empresas relacionadas, en negocios de generación y distribución con igual límite.

Benjamín Gebre, abogado de Transelec, coincidió en que la normativa se generó en un contexto que hoy no existe y la tildó de obsoleta.

" Lo que hace la restricción vertical es limitar la competencia en varios segmentos y no estar preparados para los cambios en materia de electricidad y las tendencias nuevas y otros cambios de tecnología que están a la vuelta de la esquina a los cuales hay que adaptarse y no tener estas restricciones obsoletas", apuntó.

FNE advierte riesgos

La única parte que presentó argumentos en contra de la solicitud de Celeo Redes fue la Fiscalía Nacional Económica (FNE), representada por Nicolás Abarca y Alejandro Domic, que advirtieron riesgos a la competencia en un escenario de cambios a la normativa.

En ese sentido, señalaron que uno de ellos es el sabotaje, es decir, la discriminación que las firmas de transmisión integradas verticalmente podrían realizar en la calidad de la prestación del servicio respecto de generadoras con las que compitan aguas arriba.

Asimismo, la existencia de subsidios cruzados desde la generación a la transmisión, en desmedro de empresas no integradas en las licitaciones para la construcción de obras nuevas de transmisión.

Además de ello, también advirtieron que por los cambios se generaría una integración total entre los tres segmentos.