Goldman Sachs dijo este domingo que los temores a que la guerra comercial entre EEUU y China conduzca a una recesión están aumentando y que ya no espera un acuerdo entre las dos economías más grandes del mundo antes de las elecciones presidenciales norteamericanas de 2020.
"Esperamos que entren en vigencia los aranceles que apuntan a los US$300.000 millones restantes de las importaciones estadounidenses desde China", afirmó el banco en una nota enviada a clientes.
El presidente de EEUU, Donald Trump, anunció el 1 de agosto que impondría un arancel del 10% sobre las importaciones de productos chinos por un valor de US$300.000 millones a partir de septiembre, lo que llevó a China a detener las compras de productos agrícolas estadounidenses.
EEUU también declaró a China un manipulador de divisas. Beijing niega haber manipulado el yuan para obtener ventajas competitivas.
La disputa comercial de un año ha girado en torno a cuestiones como los aranceles, subsidios, tecnología, propiedad intelectual y seguridad cibernética, entre otros.
Goldman Sachs expresó que redujo su pronóstico de crecimiento de EEUU para el cuarto trimestre en 20 puntos básicos a 1,8%, ante un impacto mayor de lo esperado de los desarrollos en las tensiones comerciales.
"En general, hemos aumentado nuestra estimación del impacto del crecimiento de la guerra comercial", precisó el banco en la nota de tres de sus economistas, Jan Hatzius, Alec Phillips y David Mericle.
El incremento de los costos de los insumos por la interrupción de la cadena de suministros podría llevar a las compañías estadounidenses a reducir su actividad doméstica, según la nota. Tal "incertidumbre política" también puede hacer que las empresas reduzcan su gasto de capital, agregaron los economistas.