Mientras Amazon.com Inc. y Google trabajan para poner sus altavoces inteligentes en el centro de los hogares conectados a Internet, ambos gigantes de la tecnología están expandiendo la cantidad de datos que recopilan sobre los clientes que usan su software de voz para controlar otros dispositivos.

Durante varios años, Amazon y Google han recopilado datos cada vez que alguien utiliza un altavoz inteligente para encender una luz o cerrar una puerta. Ahora le están pidiendo a los fabricantes de dispositivos para el hogar inteligente, como Logitech y Hunter Fan Co., que envíen un flujo continuo de información.

En otras palabras, después de conectar un accesorio de luz a Alexa, Amazon quiere saber cada vez que se enciende o se apaga la luz, independientemente de si se le pidió a Alexa que accionara el interruptor. Las televisiones deben informar el canal en el que están. Las cerraduras inteligentes deben mantener a la compañía informada de que el perno de la puerta frontal esté o no enganchado.

Esta información podría parecer mundana en comparación con el software de geolocalización de los teléfonos inteligentes que nos sigue o la cantidad de datos personales que Facebook Inc. utiliza según su actividad. Pero incluso dispositivos tan simples como las ampolletas podrían permitir a las empresas de tecnología llenar espacios en blanco sobre sus clientes y utilizar los datos con fines de mercadeo. Después de haber acumulado un registro digital de la actividad en espacios públicos, dicen los críticos, las empresas de tecnología ahora están empeñadas en establecer un frente en el hogar.

"Puede aprender los comportamientos de una familia con base en sus patrones", afirma Brad Russell, quien rastrea los productos de casas inteligentes para la firma de investigación Parks Associates Inc. "Una de las cosas más fundamentales es la ocupación. Hay mucho que podrían hacer con eso".

Algunos fabricantes de dispositivos se están resistiendo, con el argumento de que las actualizaciones automáticas de los dispositivos no le dan a los usuarios el control suficiente sobre qué datos comparten o cómo pueden usarse. Las pautas públicas de Amazon y Google no parecen establecer límites para lo que las empresas pueden hacer con la información que obtienen sobre cómo las personas usan los dispositivos.

Amazon y Google dicen que recopilan los datos para facilitar a las personas la administración de los productos electrónicos de su hogar. Las actualizaciones de estado automáticas reducen el tiempo que lleva procesar los comandos de voz y permiten que los centros de casas inteligentes presenten información actualizada en una pantalla o una aplicación de teléfono inteligente. Una mayor conciencia de lo que está sucediendo también les permite sugerir proactivamente usos útiles para sus asistentes de voz y desarrollar otros.

Los altavoces inteligentes se encuentran entre las categorías de electrónica de consumo de más rápido crecimiento, liderados por los dispositivos Echo, de Amazon, y Google Home. Eso ha llevado a las compañías y su software Alexa y Assistant a profundizar en los debates sobre las compensaciones entre servicios útiles y la recolección de datos personales. Ambos han tenido problemas públicos con la privacidad de los comandos de voz, ya sea por grabar mensajes privados por error o enviarlos a otros.

Cuando los parlantes inteligentes llegaron al mercado por primera vez, funcionaban así: después de recibir el comando "Alexa, enciende la luz", el software solicita a los servidores del fabricante de la ampolleta el estado actual de la ampolleta. Luego de recibir una respuesta que confirme que el interruptor está apagado, Alexa le indica a la luz que se encienda.

Ahora, en un impulso que se aceleró el año pasado, Amazon y Google están recomendando –y, en algunos casos, exigiendo– que los fabricantes de casas inteligentes modifiquen su código para revertir esa relación. En su lugar, la ampolleta debe informar al centro su estado en todo momento.

"Deberíamos tener una buena razón, y nuestros usuarios deberían estar de acuerdo en que es una buena razón", antes de compartir datos, afirma Ian Crowe, director sénior de Logitech International SA, un fabricante de accesorios para computadoras y productos electrónicos para el hogar.

Logitech ha intentado negociar con Amazon y Google. En lugar de decirle a los parlantes inteligentes lo que hace cada dispositivo conectado a los controles remotos Harmony de Logitech, Crowe dice que Logitech informa con descripciones amplias, especificando que un usuario está viendo televisión en lugar de transmitir información sobre su elección de canal, por ejemplo.

"Hay preocupaciones muy relevantes sobre cuánto sabe el sistema", asegura.

Crowe dice que Logitech ha tenido conversaciones sobre informes de estado con Amazon y Google, pero se negó a dar detalles. Los ejecutivos de otros dos fabricantes de dispositivos inteligentes, quienes solicitaron la condición de anonimato para proteger sus relaciones comerciales, dicen que solicitaron concesiones a Amazon y Google relacionadas con la privacidad o la transparencia del usuario y garantías sobre el uso de los datos, pero que fueron rechazados.

Un portavoz de Amazon afirma que la compañía no vende datos de usuarios y no usa la información que obtiene de los informes de estado con fines publicitarios. Los informes de estado, dice, están diseñados para habilitar funciones útiles para los clientes. Declinó comentar durante cuánto tiempo Amazon almacena los datos. Un portavoz de Google se negó a comentar sobre la implementación de actualizaciones de estado de la compañía.