Grupo de inversionistas chino intenta comprar Corona en su segunda reorganización financiera
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Un grupo de inversionistas chinos vinculados al retail y las importaciones ha manifestado su interés por adquirir el 100% de la cadena Corona, que opera 50 locales en todo el país. Los acreedores concedieron un plazo adicional, hasta el 10 de marzo, para poder afinar las negociaciones.
En los últimos días, los asesores de los hermanos Paula, Malú y Herman Schupper han intensificado las negociaciones para concretar la eventual venta de multitiendas Corona, compañía que atraviesa su segundo proceso de reorganización financiera para evitar la quiebra.
Un grupo de inversionistas chinos ha manifestado su interés en adquirir el 100% de la multitienda, que cuenta con 70 años de historia y arrastra deudas por $ 66.951 millones, revelaron personas al tanto de las negociaciones. Su objetivo es reflotar la compañía mediante un modelo de negocio probado con éxito en otras cadenas del retail chileno, como Tricot y Fashion’s Park. La estrategia se basa en tener oficinas y ejecutivos en China para negociar directamente con las fábricas, lo que permite acceder a productos de calidad a menores costos, gracias a economías de escala.
Actualmente, Corona opera 50 locales desde Arica hasta Punta Arenas y cuenta con una plantilla de 1.800 trabajadores. El 22 de octubre de 2022, la compañía solicitó acogerse a un segundo proceso de reorganización, asesorada por el abogado Nelson Contador, reconocido por su amplia experiencia en este tipo de procedimientos. El primer procedimiento de reorganización ocurrió en agosto de 2020.
Trascendió que el conglomerado chino ha hecho llegar al menos tres ofertas a Ricardo Reveco y Cristián Figueroa, socios de Carey y asesores de Paula y Malú Schupper, así como a Mario Mora, director de Corona y representante de Herman Schupper.
“No son acreedores ni proveedores de Corona. Se trata de un grupo de empresarios chinos vinculados a las importaciones del retail, no solo de vestuario, que al conocer la red de tiendas de la compañía vieron una oportunidad para mejorar sus márgenes en la venta de productos en Chile”, señala una persona al tanto de las negociaciones.
Otra fuente consultada destacó la diferencia de costos entre comprar en China a través de un trader desde Chile, o negociar directamente con las fábricas. “Los que están teniendo éxito en el negocio del vestuario en Chile tienen su maquinaria de compra en China, no aquí. Los eventuales compradores de Corona pertenecen a este mundo”, afirma.
Según actores cercanos al proceso, Corona llegó a valer US$300 millones en 2015. Sin embargo, diferencias entre los hermanos Schupper sobre el rumbo de la compañía, el cierre prolongado de tiendas durante el denominado “estallido social” y las secuelas de la pandemia deterioraron su situación financiera, llevándola a su estado actual.
La primera tienda Corona fue abierta en 1955 en Concepción por Liebish (españolizado a Leonardo) Schupper Feldstein. Este neerlandés de origen judío se asentó en Chile tras la II Guerra Mundial junto a su esposa, Selma Messcher Pollak. El matrimonio tuvo tres hijos: las mayores son las mellizas Paulina y Malú, hoy de 69 años, y el menor, Herman, de 66 años. Todos tienen también nacionalidad neerlandesa y hablan flamenco. De hecho, las hermanas utilizan cédula de identidad para extranjeros y viven buena parte del año allá. Son solteras y no tienen descendencia. Herman es casado con Jeannette Litvak y tiene tres hijos.
La marca Corona y su logo se crearon en homenaje a la reina Guillermina de Holanda, la monarca que regía Países Bajos cuando Schupper vivió en ese país, y una hábil inversora que se convirtió en la mujer más rica del mundo en su tiempo.
Las empresas relacionadas con Corona mantienen pasivos por $26.833 millones.
Hasta el 10 de marzo
Herman Schupper asumió la presidencia de Corona en 1985 y lideró la compañía hasta 2010, cuando comenzó un proceso de profesionalización del directorio. Sin embargo, este proceso se vio interrumpido en octubre de 2024, durante la segunda reorganización concursal, cuando Claudio Muñoz y Janet Awad renunciaron a sus roles de asesores de los accionistas.
Actualmente, la empresa atraviesa una reorganización que, en el peor de los escenarios, podría derivar en una quiebra. No obstante, el pasado viernes, la administración de la multitienda envió un correo a los asesores legales bancarios para persuadirlos de extender, por segunda vez, el plazo para la votación de la junta de acreedores, instancia clave para definir si se aprueba o rechaza una nueva propuesta de reorganización.
En la misiva, la empresa confirmó que existen negociaciones en curso para la venta del 100% de la compañía. Tras una votación, los acreedores acordaron conceder un plazo adicional de 10 días, por lo que la propuesta será sometida a votación el próximo 10 de marzo. En caso de ser rechazada, el tribunal declararía la liquidación forzosa de la empresa.
“La compañía está en un proceso de Acuerdo de Reorganización Judicial, con el objetivo de lograr el apoyo de los acreedores. Esta mañana, el plazo fue extendido por 10 días tras una petición de la empresa, y una de las razones para esta extensión es evaluar la propuesta de un potencial inversionista que podría tomar el control de Corona”, señaló una fuente conocedora del proceso, que solicitó mantener su identidad en reserva.
Los asesores de Herman Schupper, Mario Mora, y de Paula y Malú Schupper, Ricardo Reveco, evitaron hacer comentarios sobre este artículo, al igual que el presidente de la compañía.
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