Los fabricantes de algunas de las economías más grandes del mundo frenaron la producción mientras asisten al desarrollo de disputas comerciales entre diversos países y Estados Unidos.
Los informes de este miércoles mostraron que el mes pasado desaceleró la actividad fabril desde la región Asia-Pacífico hasta Europa. Las compañías han emitido advertencias sobre el impacto que han tenido en sus ganancias los ataques y represalias con aranceles de importación y los datos sugieren que las amenazas proteccionistas están empezando a pesar sobre el crecimiento global.
"Las expectativas más débiles para el comercio mundial se están filtrando claramente a la producción", dijo Stefan Schneider, economista jefe internacional de Deutsche Bank. "Sobre todo en muchas economías abiertas, como Alemania, pero también en Japón y Corea del Sur, las expectativas de exportación más bajas afectan la actividad de inversión".
Los fabricantes de automóviles, entre ellos la alemana Daimler AG, la japonesa Nissan Motor Co. y la surcoreana Hyundai Motor Co., han esbozado el daño que corren por el riesgo de tener que pagar impuestos más altos. Las empresas asiáticas, una parte crucial en la cadena de suministro global de productos electrónicos, se están preparando para trasladar más producción al Sudeste Asiático, ya que resulta menos atractivo producir en China. Incluso Harley-Davidson Inc., con sede en Estados Unidos, ha quedado atrapada en el fuego cruzado del conflicto comercial, por lo cual recortó las proyecciones de margen de beneficios.
La tensión quedó subrayada este miércoles cuando China advirtió a Estados Unidos contra "chantajes y presiones" porque el gobierno de Trump intenta obligar a los funcionarios a volver a negociar con amenazas de subir aún más los aranceles.
En la zona euro, donde la manufactura atraviesa su período más débil en un año y medio, las perspectivas pueden ser un poco mejores luego de que las autoridades de ambas partes acordaron postergar la imposición de nuevos aranceles para negociar barreras comerciales más bajas.
El crecimiento de la zona del euro se debilitó inesperadamente en el segundo trimestre y el índice de gerentes de compras de IHS Markit se ubicó en 55,1 en julio, solo un poco más que el mínimo de 18 meses registrado en junio, de 54,9. El economista jefe de negocios Chris Williamson dijo que los fabricantes podrían tener que reducir la producción en los próximos meses a menos que se reavive la demanda.