El Ministerio de Hacienda suma a economistas con mayor sensibilidad de izquierda a grupo tributario

Una sorpresa se llevaron los integrantes del grupo especial tributario convocado por el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, en la última sesión, pues reconocieron a dos nuevos integrantes en la reunión telemática y las pantallas pasaron de 16 a 18.

Se sumaron Claudia Sanhueza y Luis Eduardo Escobar, dos economistas con perfil más cercano a la izquierda. Ambos fueron contactados por el presidente de este conglomerado, el extitular del Banco Central, Rodrigo Vergara, a instancias del ministro de Hacienda, Ignacio Briones, quien está interesado en incorporar más miradas a este grupo.

“Rodrigo Vergara me llamó y me manifestó que necesitaba que al grupo se integraran personas con una sensibilidad más de izquierda”, admite Escobar, quien ha colaborado activamente con Chile 21, así como integró el equipo económico del candidato presidencial de la oposición y actual senador, Alejandro Guillier.

Escobar tiene un amplio bagaje como consultor independiente que ha asesorado a varios gobiernos (Nicaragua con Violeta Chamorro y Uruguay hace unos años), se desempeñó el Fondo Monetario Internacional (FMI) por una veintena de años y fue asesor del Ministerio de Hacienda durante el gobierno de Ricardo Lagos.

En tanto, Sanhueza ha estado bastante ligada al Frente Amplio, pues formó parte del equipo económico de la candidata de ese sector, Beatriz Sánchez. Y durante esta pandemia ha tenido una activa participación en los grupos de discusión sobre políticas para enfrentar el confinamiento, no sólo apoyando a los parlamentarios de esta ala, sino que también integró el grupo de los 16 que terminó con una propuesta base para el acuerdo político que creó el Fondo Covid por US$12.000 millones, En esa instancia también compartió con Vergara.

Sanhueza hoy es la directora del Centro de Economía y Políticas Sociales de la Universidad Mayor e investigadora de las dimensiones socioeconómicas del conflicto de Coes.

Cabe recordar que este grupo surgió como parte de un acuerdo entre el ministro Briones y la oposición en torno a una reforma tributaria (RT) en la cual se desechó la reintegración. La idea es que fuera integrado por especialistas que representaran a cada sector que fue parte del acuerdo. Sin embargo, tras varios desencuentros el PS se restó de esta mesa. La autoridad optó por convocar a expertos economistas como independientes y no como voz de un partido específico. Y en un principio tampoco estaba contemplado incluir en esta selección a alguien cercano al FA pues este bloque no fue parte de ningún entendimiento, ni de la RT ni del fondo Covid del cual se restó a último minuto.

Hasta la fecha el grupo liderado por Vergara ha sostenido dos reuniones telemáticas en las cuales han escuchado diversas exposiciones respecto de las conclusiones del informe que la Ocde y el FMI elaboró sobre el funcionamiento de las exenciones en el país.

Diversos asesores de Hacienda y del Servicio de Impuestos Internos (SII) han sido los encargados de profundizar diversos aspectos de este documento que contiene más de 100 páginas a través de las cuales analiza el tratamiento tributario que la norma chilena aplica sobre las ganancias de capital, la renta presunta e IVA a la construcción, en tanto exenciones, y sobre los regímenes de impuestos específicos al tabaco, a los combustibles, licores, entre otros.

Hasta el momento los integrantes sólo están nutriéndose en detalle y en todos los ángulos del informe de los organismos multilaterales, para luego configurar el método de trabajo para los próximos 8 meses.

Los especialistas de la Ocde y FMI detectaron que a los cálculos locales les faltaba información o tenían bases desactualizadas, por lo tanto habían muchos componentes considerados gastos tributarios sin cumplir con las especificaciones para estar en esa categoría, y viceversa. Por ejemplo plantearon esas dificultades en temas como zonas francas, exención de ganancias de capital, régimen de renta presunta. Asimismo revelaron que hay regímenes idiosincráticos, no conocidos en la Ocde, como la renta presunta o el beneficio a la inversión en acciones con presencia bursátil.